El Gobierno siembra dudas sobre la posición de Sánchez frente al independentismo

El Gobierno marca distancias con el PSOE y siembra dudas sobre el "interés" de Pedro Sánchez en la batalla frente al desafío independentista. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, ha justificado que Mariano Rajoy, tras su conversación con el líder de Ciudadanos, no telefoneara ayer al secretario general de los socialistas para coordinarse ante los pasos que Junts pel Sí y la CUP pretenden dar hacia la república catalana. "En todo este tiempo nadie del PSOE y, en particular, el señor Pedro Sánchez se ha dirigido al Gobierno para pedir información ninguna, no así el señor Rivera", ha sentenciado la número dos de Rajoy.

Sáenz de Santamaría entiende que "lo normal" es que quien cuenta con 90 escaños, como el PSOE, llame al presidente, que logró 123, y no al contrario. "¿Ha consultado el señor Sánchez al presidente del PP, que tiene mayoría absoluta en el Senado, sobre la cesión de senadores a los grupos de Convergencia y Esquerra?", ha reprochado la vicepresidenta, quien cree que la ayuda de los socialistas para que partidos que buscan la secesión salgan "reforzados" y con grupos parlamentarios propios en la Cámara alta, tiene una "trascendencia importantísima".

En este escenario, el Consejo de Ministros ha acordado hoy plantear un conflicto de competencias ante el Tribunal Constitucional contra la Generalitat catalana por la creación de la consejería de Asuntos Exteriores. Este departamento, del que el Gobierno pide la suspensión de sus funciones, vulneraría una competencia que, según el ministro de Justicia, corresponde en exclusiva al Estado. De ser aceptada la petición, el Ejecutivo de Cataluña tendría que decidir, explica Rafael Catalá, entre la modificación del decreto de sus estructuras o la supresión de la consejería.

Sobre este asunto, desde la Moncloa no se ha hablado con Sánchez, a quien la vicepresidenta pide que "manifieste su interés" y su voluntad de ser informado, cuando podría llegar a gobernar con partidos nacionalistas catalanes. "Hay decisiones que pueden tomarse en funciones, igual que un Gobierno entrante puede retirarlas, eso también me gustaría que manifestara su opinión el señor Pedro Sánchez por si tuviera la investidura con los votos de aquellos", ha advertido Saénz de Santamaría. La última vez que Rajoy y Sánchez contactaron para abordar el proceso independentista fue tras la investidura de Carles Puigemont como presidente de Cataluña.

El encargo del Rey a los socialistas para intentar formar Gobierno ha sumado tensión a las relaciones entre los dos principales partidos. En el trasfondo del malestar del Ejecutivo se encuentran los portazos reiterados de Sánchez al diálogo con Rajoy para llegar a un pacto de investidura que mantuviera a los populares en la Moncloa. De ahí que fuentes populares dejen claro que si el secretario general del PSOE quiere conversar ahora con el presidente, tenga que llamar él mismo. "Rajoy es un señor educado", recuerdan en la Moncloa.