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A. MORIYÓN / Á. FUENTE
Jueves, 5 de noviembre 2015, 00:22
La presidenta de Hunosa se ha tomado al pie de la letra lo de que no hay mejor defensa que un buen ataque. Teresa Mallada, que no está dispuesta a permitir que el PSOE ponga en duda la legalidad con la que se actúa en la hullera, ni mucho menos que se vincule a la entidad minera ni a su persona con el escándalo del 'caso Pokemon', contestó ayer con un ataque a las acusaciones realizadas el pasado martes por la cabeza de lista del PSOE por Asturias para el Congreso, Adriana Lastra.
La también secretaria de Política Municipal del PSOE dejó entrever que el escándalo que ahora salpica a algunos dirigentes y exdirigentes políticos del PP esconde una presunta «trama delictiva» en el partido que preside Mercedes Fernández. Pero, además, puso el foco sobre el contrato que la empresa Hunosa mantuvo con Ingenium, la consultoría de Joaquín Fernández, al que se hace referencia en las grabaciones recogidas en el sumario de la conocida como trama del agua, pieza separada del 'caso Pokemon'. Adriana Lastra anunció que el PSOE pediría explicaciones a través de la diputación permanente del Congreso al Gobierno de Mariano Rajoy sobre las relaciones contractuales entre la corporación pública y el considerado 'conseguidor' de contratos en la presunta trama de corrupción, y llegó a poner en entredicho el papel de la propia presidenta.
Teresa Mallada defendió una vez más la legalidad de «todos los contratos» de la empresa que preside y calificó de «incomprensible» que la candidata socialista «arme un revuelo» por un contrato comercial -por el que se abonó 6.000 euros, que tenía una duración de tres meses y que lleva rescindido más de dos años y medio- que, asegura, «no tiene nada que ver con la trama del agua». Máximo, alega, cuando se están investigando dentro de esta trama de corrupción «contratos cuantiosos» suscritos por administraciones socialistas. Por ello, instó al PSOE a aprovechar esa posible intervención ante la comisión permanente del Congreso para dar explicaciones sobre estos contratos «que han sido hechos por responsables socialistas».
Mallada se mostró abierta a acudir a cualquier comisión o foro para ofrecer las aclaraciones oportunas, aunque mostró sus dudas sobre el verdadero objetivo del PSOE. «La candidata socialista sabe de sobra que la comisión permanente no se reúne en campaña electoral, y por eso lo anuncia, porque no existe un caso PP», defendió. La presidenta de la hullera opina que las acusaciones de Adriana Lastra responden más bien a un «ataque político» que obedece al hecho de que su nombre aparecía, al menos hasta hace unos días, como uno de los posibles cabeza de lista del PP por Asturias en las próximas generales. «Si la candidata socialista se atreve que diga que he hecho algo ilegal, que lo diga y que me lleve al juzgado porque, de lo contrario, si sigue vinculándome a presuntas tramas corruptas con acusaciones falsas, puede tener bien seguro que seré yo la que acuda a los tribunales», advirtió.
En la misma línea, el diputado popular David González Medina acusó a Lastra de ejercer una «doble moral» por hacer declaraciones con las que se ha dedicado «a esparcir basura» sin ejercer la autocrítica. La que no quiso entrar a hacer valoraciones al respecto, ni tampoco sobre las explicaciones ofrecidas el pasado martes por Agustín Iglesias Caunedo, fue la presidenta del PP. Para Mercedes Fernández la «prioridad» ahora es la negociación abierta con Foro para el 20-D.
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