La inversión, única partida que no sube en el presupuesto de Asturias para 2015

Todo depende del color del cristal con que se mira, o con que se presentan los hechos. Ayer, la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, explicó las líneas principales de un proyecto de presupuestos que tiene luces (un incremento del 3,7% en su montante respecto al de 2013 en la actual situación no es despreciable, así como la subida de la partida destinada al salario social, unos destacables 83,3 millones de euros), pero también sombras, entre las que la más llamativa es la caída de la partida destinada a inversión, de 330 millones de euros. Ya en el último presupuesto aprobado, el de 2013 (en aquella ocasión, aún de la mano de IU y UPyD), esta partida, que era de 364 millones (34 más que la que se prevé para 2015) había bajado en nada menos que 62 millones respecto a lo que se dispuso en 2012 tras el ajuste presupuestario de las cuentas prorrogadas de 2011.

Carcedo afrontó el inicio de su exposición por los datos positivos, anotando que la prioridad fue «dar cobertura a lo que más la precisa» y subrayando que se han «exprimido» todas las posibilidades financieras con un enfoque «realista». Así, presentó unas cuentas 151 millones de euros más elevadas que las últimas aprobadas, de 3.959 millones de euros, de los que se destina a gasto no financiero 3.576, y en los que la mayor partida es la destinada al gasto social, con un 67% del total y un montante de 2.649 millones de euros.

Con estos primeros datos lanzados, la consejera de Hacienda aludió de inmediato a la partida para inversiones, de 330 millones de euros, y la presentó como «dos millones de euros más elevada» que la partida incluida en el proyecto de presupuestos de 2014, que no llegó a ser aprobado. Buena parte de esas inversiones, 145 millones, se utilizarán en la política de conservación y seguridad en carreteras y en el dragado y mantenimiento de la red de puertos. El apoyo a las entidades locales se cifra en 165 millones.

Siguiendo con los datos positivos, Carcedo anotó que el Gobierno dispondrá de una capacidad de gasto «ligeramente mayor» que en 2014 por el incremento de los ingresos no financieros en un 2,7%, hasta los 3.408 millones de euros, que son 89,5 millones más que en lo previsto para 2014. Porque la comparativa de Carcedo siempre se refirió al nonato proyecto del año en curso.

Con todo, ese teórico incremento de la capacidad de gasto se compensa de inmediato por la reducción del 1% al 0,7% del techo del déficit que las comunidades autónomas pueden asumir. El Gobierno del Principado ha hecho gala de cumplidor de las exigencias a este respecto del Ejecutivo de Mariano Rajoy, al punto de recibir críticas de la oposición parlamentaria por su celo en este apartado. Carcedo concretó que esas tres décimas de disminución en la capacidad de acudir al déficit se cifrarán en 2015 en una «minoración de la capacidad de gasto» de 89 millones de euros», lo que «neutraliza» la ventaja antes expuesta.

Otra ventaja de la situación de «estabilización de la economía», según expuso Carcedo, es que los intereses financieros de la deuda del Principado «se reducirán en 2015 en unos 38 millones de euros». Casualmente, esos 38 millones que el Gobierno no tendrá que gastar en pagar intereses coincide con el impacto previsto de las medidas tributarias acordadas con el PP. Porque son «34 millones de euros» lo que supondrá la bajada de dos puntos en el tipo marginal de la parte autonómica del IRPF para el tramo de renta entre 0 y 12.450 euros, que «favorecerá a las rentas medias y bajas», pero que será de aplicación para la totalidad de los «513.000 declarantes» que hay en Asturias, dado que «por el primer tramo pasan todas las rentas». Y son otros cuatro millones por el efecto de las nuevas deducciones previstas por la utilización de las escuelas de 0 a 3 años (un 15% del gasto, con un límite de 330 euros por menor y aplicable a las rentas individuales de hasta 25.009 euros y a las conjuntas de hasta 35.240, por lo que Carcedo estima en unos 9.000 los beneficiarios teóricos) y por la compra de libros de texto (con un límite de 50 a 100 euros por descendiente y 150 euros en el caso de las familias numerosas, con unos 24.700 posibles solicitantes).

Prioridades

El Gobierno presentó ayer como prioridad política el gasto social, que se lleva 2.649 millones de euros repartidos en varias consejerías. Incluso, Carcedo insinuó de varias formas, tal vez para compensar el efecto que tiene ante su teórico electorado que se haya pactado con el PP, que al Ejecutivo le habría gustado incrementarlo más. En todo caso, la consejería que más fondos tiene destinados es, como siempre, Sanidad, con 1.492 millones de euros para «garantizar el mantenimiento de la red asistencial, de la cartera de servicios sanitarios y del empleo estructural», y se aporta una pequeña partida, de 310.000 euros, para la investigación sanitaria, destinada a la puesta en funcionamiento de la Fundación para la Investigación e Innovación Biosanitaria en Asturias (FINBA).

En Educación, consejería que cuenta con 756,4 millones de euros, se incluye uno de los acuerdos con el PP, que pasa por aumentar la partida destinada a obras en los centros educativos.

Por lo que toca a Bienestar Social, cuyo presupuesto asciende a 381 millones de euros, lo más destacado es la ya comentada partida de 83,3 millones de euros para el salario social, como ya habían avanzado que ocurriría varios grupos de la oposición. Al Plan Concertado se destina 26,8 millones de euros y se prevé un incremento de 270 plazas residenciales del ERA.

En la misma consejería, se aplicarán 29 millones para Vivienda. Con parte de dichos fondos, Vipasa pondrá en marcha el programa de intermediación para el alquiler de viviendas desocupadas de propiedad privada, según figura en el Plan de Vivienda de 2014 a 2016.

Al fomento de la contratación, a través del Servicio Público de Empleo, se destinarán 89 millones de euros, con los que se pondrán en marcha nuevas medidas, como el programa 'Ocúpate' destinado a formar jóvenes sin estudios ni cualificación profesional, con una dotación de 3 millones de euros, y también el programa 'Actívate', que empleará 5 millones de euros en formar a parados de larga duración sin estudios, un sector que preocupa especialmente a todos los agentes sociales.

En el ámbito de la actividad académica y de su aplicación a la empresa, el Plan de Ciencia, Tecnología e Investigación se llevará 74 millones de euros, complementados con ayudas a empresas por unos 10 millones. La Universidad de Oviedo recibirá una transferencia de 126,6 millones de euros para su funcionamiento durante 2015.

Por último, se destinarán 8,2 millones a modernizar las explotaciones agrarias; 450.000 euros al Plan de Calidad de la Leche; 6,9 millones a apoyar el sector forestal, y 4,9 millones de euros a las ayudas al sector pesquero.