Oscuridad en el camino a la gloria

La victoria en la Eurocopa y el triunfo en Wimblendon han encumbrado a futbolistas como Lamine Yamal, Rodri Hernández, Mikel Oyarzabal, Nico Williams y al tenista Carlos Alcaraz. En unos días estaremos pendientes de otros 382 deportistas españoles que participarán en los Juegos Olímpicos de París. ¿Pero qué hay detrás de un deportista de élite? ¿Qué ocurre cuando se giran los focos?

Mónica Yugueros

Gijón

Martes, 16 de julio 2024, 18:16

Nadie duda del sacrificio físico que es necesario soportar para alcanzar la excelencia en una disciplina deportiva. Horas y horas de duros entrenamientos y una concentración máxima para conseguir objetivos cada vez más ambiciosos. Los deportistas profesionales dedican su vida, las veinticuatro horas del día, al triunfo. Pero hay muchos factores externos que influyen en los resultados soñados. La presión, la incomprensión, la autoexigencia, la falta de madurez, las circunstancias personales afectan en el estado emocional y la salud mental se deteriora. La afición crea dioses, nombres propios que hoy corea con fervor, mientras dura la miel en los labios, pero que olvidará en cuenta comiencen las lesiones, los malos resultados o la retirada. No estar a la altura de las expectativas, fracasar o bajar el rendimiento se lleva por delante a dioses. En este podcast conoceremos la historia de tres exdeportistas asturianos, tres nombres propios que consiguieron la gloria, a un precio, a veces excesivamente alto. La jugadora de voley Mireya Delgado, la atleta Rocío Ríos y el futbolista Juanele.