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En Asturias no todo es playa. El paraíso natural, refugio climático de muchos españoles, ofrece alternativas para bañarse lejos del mar ya que, aunque Asturias cuenta con los mejores arenales, también es posible encontrar impresionantes zonas de baño en ríos. Además, a algunas de estas playas fluviales se accede mediante una pequeña ruta, una buena opción para quienes quieran el doble de planes en Asturias para disfrutar en verano.
A la ribera del Sella esta playa fluvial se enmarca en un entorno único y muy cerca del Parque Nacional de Picos de Europa. Se sitúa cerca de la iglesia del pueblo y su acceso es a pie ya que no cuenta con aparcamiento para coches.
También en Cangas de Onís y cerca de Amieva existe una poza natural muy conocida por los asturianos. La olla de San Vicente se llena en verano de cientos de bañistas en busca de un chapuzón no sin antes recorrer la ruta de acceso de unos 45 minutos a la vera del río Dobra, que lleva a las aguas cristalinas y dulces de esta poza.
Una zona de baño natural y por la que discurre el río Nalón. Se ubica en la pequeña población de El Condado, en la que viven unas 450 personas y está situado en la comarca del Alto Nalón.
En Villayón, un pueblo de la denominada área vaqueira, y tras un breve paseo entre prados, podremos descubrir dos de las tres cascadas que hay en este paraje natural. La ruta que lleva a ellas es uno de los atractivos paisajísticos más espectaculares del Principado y donde poder darse un buen chapuzón tras terminar la ruta de 3 km.
A pocos kilómetros de Oviedo encontramos una zona de baño con un paraje lleno de vegetación y una poza de aguas cristalinas formada por el río Nora al cual los vecinos cercanos acuden cada verano para darse un baño en sus aguas.
La asociación de cangueses la rehabilitó hace catorce años para que todos pudieran darse un baño en ella. Es un sitio seguro ya que la presa desvía agua a un canal para que los más pequeños puedan jugar sin preocupaciones de peligro. También se instalaron zonas de sombrilla y de ocio para disfrutar de un día de verano.
El concejo marinero de Castropol tiene una ruta situada entre Piantón y Vilarín de casi tres kilómetros para descender a un río que da a la cascada de Cioyo, un salto de agua de 30 metros de altura donde poder darse un chapuzón.
Justo bajo el puente en el cauce del río Deva están las pozas donde poder bañarse en aguas frías y calientes. Su acceso no es nada fácil así que hay que bajar con precaución para disfrutar de estos baños durante todo el año.
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Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
José A. González y Álex Sánchez
Clara Alba y José A. González
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