Todos a bailar en la fiesta de 'El Rey'

«Yo siempre estoy y se me espera», canta Loquillo en 'El Rey', el magnífico autorretrato firmado por Igor Paskual que da título a su último álbum y a la gira que ayer le trajo con su potente banda a Metrópoli. Habitual estrella en el cartel del festival, al Loco siempre se le espera con fervor en Gijón, una ciudad de arraigado abolengo rocker en la que cuenta, como en toda Asturias, con una fiel y numerosa parroquia de incondicionales dispuestos a todo por reencontrarse con su ídolo frente a los escenarios en los que el barcelonés lleva batiéndose el cobre más de cuarenta años. El último clásico -como se proclamaba el cantante en su anterior disco- aún tiene mucha gasolina que quemar y así lo mostró anoche presentando con el calor de su directo una notoria selección de los temas del nuevo disco, combinados con algunos de sus imprescindibles clásicos.

Horas antes de la salida del Loco y los suyos a las tablas sus fans se hacían notar calentando motores por el recinto ferial Luis Adaro. Un punto de encuentro de la grey para ir haciendo boca se lo brindó la prueba de sonido de los músicos, con la participación del cantante entre bastidores. El timbre singular de su voz atrajo pronto en las cercanías de la explanada del escenario a los más avispados. Mientras contemplaban el ensayo de los integrantes de la banda con sus ropas de calle, algunos de ellos expresaban sus particulares impresiones sobre la evolución del rockero desde sus inicios con la movida década de los 80 hasta hoy.

Sin llegar a la devoción incondicional, Pablo Fernández confesaba seguir con verdadero interés la estela de Loquillo desde la primera vez que lo escuchó y su opinión acerca de él tampoco dejaba lugar a dudas: «Como todos los artistas ha tenido sus más y sus menos, pero creo que en general siempre ha ido a mejor, es una carrera muy larga y seguro que hoy nos vuelve a sorprender, con él eso está asegurado», manifestaba. Con la pasión por el cantante visible en sus camisetas, Tania Fersini y Francisco Javier Pantiga asistían a la prueba deseosos de que llegara la noche para el momento de la verdad: «Somos fans del Loco de toda la vida, la última vez que lo escuchamos fue aquí en el 18 y la verdad es que lo hemos ido viendo superándose cada vez más desde el 'canalla' de Trogloditas a su madurez, y es como el buen vino, llegará un momento en que eclosione y se funda con el cosmos porque es un genio el tío». En cuanto a la banda, se mostraban igual de claros: «Lleva años repitiendo la alineación y es por algo: Igor es un crack, Josu una máquina, son una pasada todos y lo volverán a demostrar en Gijón. Vamos a disfrutarlo con todas las ganas».

Llegada de Madrid, Blanca Fernández relataba que venía siguiendo el tour de 'El Rey' en casi todas las ciudades por las que había ido pasando y en sus planes estaba el continuar en las próximas plazas: «En realidad lo descubrí relativamente tarde, hacia 2014, pero es que esto engancha, vas a un concierto y quieres más y más», declaraba. En cuanto a las virtudes que destacaba en su ídolo ponía en primer lugar, «sobre todo, su propia forma de saber evolucionar y pasar del rócker de pantalón de cuero a ir adaptándose a los tiempos como van cambiando y a su edad, a seguir siendo un referente de lo suyo pero con clase. Su carisma y prestancia son indudables, pero especialmente su visión para sacar partido de sus músicos, todos ellos excelentes, saber rodearse de buen talento y no restarles protagonismo, dejarles que también brillen. Tanto él como la banda viven un gran momento y por eso llenan los escenarios», opinaba.

A su lado, otros compañeros de ruta loquillista, los también madrileños Osito Paredes, Javi Domínguez, Andrea Carmona, Silvia Fernández y Ana, aferrados a una bandera con el logo del cantante coincidían en valorar su evolución en el tiempo: «Ha llegado hasta hoy de la mejor manera posible, es cierto que hay algunos seguidores a los que no les ha gustado cómo ha ido cambiando porque creen que era más cañero antes pero la propia época hoy y su madurez son otras. Él siempre se ha arriesgado, ha tocado todos los palos y no se ha encasillado. Para nosotros todos esos cambios han sido positivos y los musicazos que le arropan son brutales. Nos lo vamos a pasar genial esta noche, como en toda la gira», prometían.

Los augurios de los seguidores se cumplirían con creces cuando al cierre de esta crónica salían a darlo todo en el escenario de Metrópoli El Loco y sus músicos: Josu García, Igor Paskual y Mario Cobo en los coros y las guitarras, Alfonso Alcalá en el bajo, Laurent Castagnet a la batería y Lucas Albadalejo en los teclados. Era su fiesta y El Rey volvía a coronarse en ella.

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