¿Qué son las manchas blancas que salen en las uñas?

Pero, ¿qué son realmente esas manchitas? Lo primero de todo, es necesario saber que el nombre de las mismas es leuconiquia, y existen de muy diversos tipos, unos más peligrosos que otros.

Falta de calcio o de zinc es la justificación más habitual que se escucha para la aparición de la leuconiquia, pero hasta ahora no hay ningún estudio que demuestre su veracidad.

En la mayoría de los casos sí que es verdad que proviene de alguna mínima lesión que se produzca sin que uno no se dé cuenta, cuando la uña empieza a crecer; o también de un proceso inflamatorio o traumatismos repetidos, como de hacerse manicuras agresivas constantes, que están muy de moda. Se dice también que utilizar productos de limpieza como lejía, amoniaco u otros detergentes, pueden producir estas manchas.

La condición física y emocional de las personas afecta mucho a la leuconiquia. Por ejemplo, el frío puede ser un motivo, y también atravesar una situación de gran estrés. Pero también si uno tiene familiares con estas manchas, puede heredarse. Aparecen sobre todo en las manos, porque son las que más en contacto están con todos esos factores que podrían ser determinantes para la aparición de las manchas. Los pies están más protegidos.

En caso de que persista la aparición de estas manchas, es buena idea consultar con el dermatólogo. Por norma general no supone ninguna enfermedad grave, pero hay excepciones. A veces son un indicio de que existen enfermedades internas como cirrosis hepática, insuficiencia renal o cardiaca y diabetes.

Normalmente, cuando las manchas no están en la uña sino debajo, en la piel y, por tanto, no crecen con la misma, ya no se habla de leuconiquia. Será una pista de alguna otra enfermedad. O si en lugar de manchas como pequeñas nubes, aparecen líneas blancas a lo largo de la uña, significa que algo anómalo sucede de forma permanente en la matriz.

No hay un tratamiento específico para acabar con la leuconiquia más allá de un buen cuidado de las uñas. Los especialistas recomiendan mantener la zona higienizada y correctamente hidratada para que las uñas crezcan fuertes.

Hay que evitar morderlas, limarlas con fuerza y, cuando se vayan a pintar, ponerles siempre una capa de esmalte protector.