El TSJA exige la unificación «inmediata» de los juzgados e «impulso inversor»

Fue en septiembre de 2022 cuando el presidente regional, Adrián Barbón, expuso en sede parlamentaria su tetris. Por un lado, los estudios de Educación y Formación del Profesorado, Ciencias –ambas en Llamaquique– e Ingeniería de Software –en el campus de Los Catalanes– se mudarán a las antiguas sedes de Maternidad, Consultas Externas y Silicosis del antiguo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y cederán sus espacios a juzgados.

También detalló que la Audiencia Provincial se trasladará al actual edificio de Ciencias y dejará libre su espacio a las sedes dispersadas por la geografía ovetense, pero para que esta operación salga adelante depende de la Tesorería General de la Seguridad Social.

Es el dueño mayoritario del conjunto de El Cristo y, en un primer momento, se esperaba que la transferencia de los edificios se cuajase en tres meses. Sin embargo, van seis y sin visos de resolverse. El tiempo apremia. «Después del periodo transcurrido, lo cierto es que no se conoce ningún avance ni proyecto concreto al respecto. Tampoco se están acondicionando los edificios para uso de la Universidad de Oviedo ni ha habido el traslado de los inmuebles ocupados por ellos en la zona de Llamaquique».

Un retraso que se suma a todos los que ha habido hasta el momento para unificar las sedes judiciales y que no puede esperar más. En palabras de Chamorro, es una «reivindicación constante» aglutinar las ochos sedes judiciales «en un solo edificio o en varios cercanos en el entorno de Llamaquique»; sin embargo, «todavía no se ha logrado una solución definitiva» a pesar de las reiteradas reuniones que ha mantenido el Principado.

En ellas siempre ha trasladado la misma postura: es «imprescindible un impulso inversor» para acometer «una reorganización inmediata» de unas sedes judiciales que no paran de crecer y donde registran problemas a diario.

Sin ir más lejos, el año pasado se creó el juzgado de Primera Instancia número 12 sin que tuviese sitio para instalarse. La decisión que se tomó es ocupar la que fuera sede de Telefónica en Llamaquique donde se encuentra ahora el Contencioso-Administrativo número 6 –antes estaba en la calle Pedro Masaveu– y donde se espera que este año pasen dos de los Mercantiles. No obstante, el piso al lado del parque de Invierno no se ha quedado vacío; ha sido ocupado por el nuevo juzgado teniendo los mismos problemas que antes: «Carece de salita de espera».

Los problemas principales se siguen encontrando en el Palacio de Justicia. «Son notorias por reiteradas las limitaciones, disfunciones e inconvenientes del edificio de la plaza Eduardo Gota Losada», donde hay un «único acceso común para el público y el conjunto de los profesionales», y «existe dificultad para aislar denunciantes de denunciados» cuando se tratan temas como abusos, violaciones o violencia de género. También se registran «elevadas temperaturas por irradiación solar», no hay ventilación adecuada o las salas de vistas son limitadas.

La situación no se queda aquí, según Chamoro. «Tiene muchos pasillos estrechos y las oficinas, a veces, se quedan pequeñas» para los funcionarios. Además, y a pesar de la juventud –el edificio ha cumplido las dos décadas–, tiene «bastantes problemas de humedades» que afectan a las terrazas superiores y a la fachada principal. «Cada cierto tiempo se realizan reparaciones para evitar las filtraciones de agua y sellar además de renovar las juntas de vidrios», pero la experiencia ya ha demostrado que no es la solución definitiva.

Otros defectos se encuentran en el juzgado de guardia, que «se ubica en un espacio muy reducido», al igual que el juzgado de Violencia sobre la Mujer, cuya sala «es pequeña y carece de ventilación adecuada».

La sede de Llamaquique tiene dos plantas buenas: la de entrada al edificio y la primera con salas –1, 2, 3 y 4– amplias, luminosas y con ventanas. El problema está en los sótanos con las salas 5 y 6 de los mercantiles, que se «encuentran por debajo de la rasante de la acera» y la última estancia «carece de ventilación adecuada». Deficiencias de espacio son las reinantes también en la calle Rosal, donde se encuentran los juzgados de Primera Instancia número 10 y 11. «Las salas son pequeñas y tienen una salita de espera muy reducida para las personas que puedan acudir a los juicios».

Las dos últimas sedes son el juzgado de Menores de La Ería y los palacios de Valdecarzana y Camposagrado del Oviedo Antiguo. La estancia para la celebración de los juicios de la primera «tiene cierta amplitud, pero en ella suelen estar presentes un gran número de personas entre el juez, los miembros de equipo técnico, Fiscalía y los profesionales de las partes».

Mientras, los palacios del casco histórico tienen deficiencias como que en la Sala de lo Contencioso-Administrativo está «repartida la oficina judicial y los despachos» de los magistrados entre los dos palacios y falta una sala multiusos en la Sala Social.