Una sentencia que no convence

«Me enteré de todo y me parece muy mal», señala, sin dudarlo, Carlos Tuñón. Ensalza a los efectivos municipales: «Son unos bomberos que atienden de lo mejor y se portan muy bien». Además, «él (Eloy) no estaba de servicio, todavía se expuso más».

José Luis Marrón diferencia entre «la situación social de la familia, que es lamentable» y «si la sentencia está argumentada», algo que «no hay que mezclar», y en su opinión tampoco valorar sin haber leído el fallo judicial. «Yo no lo haría» ante una «normativa muy estricta», considera, pero sí defiende «restituir el nombre de la familia si se ha manchado».

«Nada» de acuerdo con la decisión de la jueza se manifiesta Quintín Tomás, que se pregunta si una vida humana «no vale más que eso». A su modo de ver, servirá para que la próxima vez que «estés en peligro» dejes que «se queme medio Oviedo».

«Está muy mal. El Ayuntamiento ofrecía 200.000 euros a la viuda y ahora salen con 18.000, es una vergüenza», afirma Ceferino Álvarez, que ha seguido con interés este caso a través de este diario. Anima a la familia a recurrir. «La jueza duda de que haya responsabilidad, pues que la ponga».

Toño Andrés expresa su apoyo a la familia de Palacio: «Estoy con ellos, tienen toda la razón. Hasta que pasa la cosa, todo está claro, pero aquel día había muchos bomberos». También cree que deberían recurrir y que el Consistorio debería pagar una indemnización mayor. «No es justo que los dejen con 18.000 euros por una muerte», concluye.

El asunto tendrá recorrido. La familia del bombero fallecido ha anunciado que recurrirá la sentencia al TribunalSuperior de Justicia de Asturias. «Si pretendían hundirnos no lo conseguirán. Vamos a seguir luchando hasta que se haga justicia», expuso Marta Valle.El fallo también ha causado malestar entre los colegas de Palacio, que se manifestarán el 3 de abril por este asunto y las deficiencias en el servicio.