Wenceslao López: «Ricardo Fernández es un candidato con garantías para ganar»

En su defecto, y con el objetivo de recuperar la Alcaldía perdida en 2019 a manos del popular Alfredo Canteli, López ha depositado toda su confianza en uno de sus hombres fuertes, Ricardo Fernández, que se disputa estos días las primarias del partido junto a Carlos Fernández Llaneza, Natalia Sánchez Santa Bárbara y Rosana Prada.

López no titubeó ayer en referirse a Fernández como el «candidato superior» y «el que mejor puede defender Oviedo y el socialismo». Esto, enumeró, por «múltiples razones objetivas y no simplemente de amistad: un candidato con gran experiencia, con un gran conocimiento, de valía demostrada y que no tiene nada que demostrar, y unas sólidas raíces en el socialismo». Un candidato, confirmó, «con muchas garantías para ganar en Oviedo, que es lo que hace falta» y capaz de «defender el proyecto de un colectivo» como lo es el PSOE sin personalismos. Del resto de por el momento precandidatos -ayer se abrió el plazo de recogida de avales-, López se limitó a decir que «los veo bien» y que «a todos los respeto».

Con todo, lo cierto es que a las espaldas del exalcalde hay cerca de medio siglo de democracia activa en el partido y una primera fase en la clandestinidad durante la dictadura, pero no se irá con pena. «Evidentemente hubiese sido genial poder repetir en la Alcaldía para culminar lo que habíamos iniciado, pero espero que ahora volvamos a ganar para continuar los proyectos que esta derecha ha tirado por tierra». Tampoco con espinas clavadas: «Yo creo en la utopía y si no crees en lo imposible, nunca podrás hacer lo posible», terminó.

A su lado, Fernández y Sánchez Santa Bárbara flanqueaban uno y otro extremo de la comitiva socialista a su llegada a la plaza. El primero, cauto, mostró «tranquilidad» ante las primarias y anunció que irá «paso a paso», primero recogiendo avales y explicando sus propuestas a la militancia. Un proceso en el que explicó que «me dirigiré a toda la militancia socialista» y no a «sectores o corrientes concretas», y en el que no echa en falta apoyos expresos de las ejecutivas porque «hay que dejar que la militancia se manifieste, debata y decida».

Por su parte, la candidata comparó las primarias con «el deporte» y destacó la necesidad de «buscar un buen equipo» para «hacer un buen programa». «Prefiero pecar de precavida, como en las carreras», enfatizó.