Robles pide aumentar el ritmo de fabricación del 8x8 con una nueva línea de producción en Trubia

Allí, y acompañada de la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, Robles transmitió a los presentes «su gran preocupación por la falta de avances y por el nivel de cumplimiento del programa 8x8», un vehículo «esencial para el Ejército de Tierra», tal y como destacaron después fuentes de Defensa. Está valorado en 2.100 millones de euros para la producción de 348 unidades del blindado, se está llevando a cabo casi íntegramente en la factoría armamentística de la villa cañonera y se alargará, por lo pronto, hasta 2027. Frente a ellas, amén de otras autoridades militares, los directores generales de las cuatro empresas que configuran Tess Defence: Juan Escriña (Santa Bárbara Sistemas), Jose Vicente de los Mozos (Indra), Angel y Javier Escribano (Escribano) e Ibon Aperribay (Sapa).

No fue lo único. Robles también requirió la contratación de «mayor capacidad de ingeniería y aumentar el ritmo de fabricación», incluyendo «una nueva línea de producción» en la planta trubieca, a la vez que solicitó «agilizar las entregas del grupo motopropulsor de Sapa, las torres de Escribano y el software del sistema de misión de Indra». Esto último no es baladí, ya que hay que tener en cuenta que cada empresa se encarga de una parte del vehículo y que luego es en Trubia donde se integran todos esos elementos en las barcazas, por lo que el retraso de una puede afectar a todas las demás como las fichas de un dominó.

Fuentes cercanas al consorcio explicaron después que este año se entregarán 92 unidades del 8x8, tal y como quedó pactado con el ministerio a mediados del año pasado durante la firma del reajuste de un plan de entregas que ya venía afectado de antes por los retrasos, por lo que no se estaría incumpliendo el contrato. También está previsto que sean cuatro las modalidades del vehículo de combate: zapadores, infantería, observación avanzada y puesto de mando de compañía, siendo las dos primeras versiones las que se entregarán este año, cuya cualificación ya se ha iniciado. Por otro lado, esperan empezar a trabajar en las otras dos variantes el año que viene. Para ello, las empresas deben cerrar el diseño para que lo revise y autorice el Ministerio de Defensa.

La fabricación del 8x8 comenzó a finales de 2021 con un calendario de entregas estricto en el que se detallaba que los primeros 41 vehículos serían puestos a disposición de Defensa entre 2022 y 2023. Esto, a pesar de que los primeros siete se entregaron hará algo más de un año, no se ha cumplido y provocó la citada reprogramación del calendario. Unos retrasos que, entre otras cosas, vinieron motivados por la tardanza a la hora de firmar el contrato del sistema de comunicaciones que llevarán los blindados.