«La rivalidad entre géneros musicales no tiene sentido»

La primera vez que el guitarrista de la banda Warcry, Pablo García, pisó un instituto para hacer divulgación musical se encontró con que los adolescentes no sabían quien era Michael Jackson. Tampoco Elvis presley o Jimi Hendrix. Aquella lo entristeció profundamente pero, lejos de caer en el derrotismo, encontró en las películas y los anuncios buenos ganchos para atraer a los más jóvenes a la historia de la música. Así, a través de referencias reconocibles, e intercalando en su discurso hipnóticos solos de guitarra, el asturiano dio por inaugurada ayer la III edición del Oreyinas Fest en el colegio público de Ventanielles.

García intercaló nociones teóricas con interpretaciones de piezas icónicas de Los Beatles, Iron Maiden o Queen. Durante la sesión los jóvenes se dejaron llevar por los ritmos, acompañando la música con movimientos de cabeza e incluso palmas.

El guitarrista asturiano invitó a los pequeños a investigar distintos estilos para formar su propio gusto. «Os pueden gustar los Rolling y Rosalía, en música lo importante es disfrutar», alegó García, ferviente defensor de que «la rivalidad entre géneros musicales no tiene sentido».

Cerca de 270 estudiantes de Primaria asistieron al Oreyinas Fest, pulsera festivalera incluida. La programación musical para esta semana incluye conciertos del grupo de pandereteiros, Cantaruxare, del coro Son Astur y de María Daz, ganadora del concurso XXV Oviedo Rock, que hará una demostración acompañada del piano y de su voz.En principio, los conciertos, se repartirán en dos sedes, ayer y hoy, en el salón de actos del colegio de Ventanielles; mañana y pasado, en el aulario de Infantil.

La idea del Oreyinas Fest surgió hace algunos años con la intención de acercar la música en directo a los más jóvenes. «Muchos de ellos nunca habían ido a un concierto y era una oportunidad de oro», explicaba ayer el profesor de Música y coordinador de la actividad, Iñaki Sánchez. Él y la profesora de Infantil, María Meana, echaron a andar el proyecto que hoy cuenta con una programa mucho más variada gracias a la colaboración de la comunidad educativa: «los padres ayudan a traer artistas de gran proyección y los chavales están encantados», dijo Sánchez.