«Hay mucha presión porque no podemos atender a todos»

La fundación atiende a 1.700 personas de forma intensiva en sus diferentes programas socioeducativao y a otras 3.500 de forma puntual y su buena labor le ha llevado a ser un referente en España. Este hecho no pasó ayer inadvertido para el presidente: «Vinjoy ha roto con el tradicional molde asistencial. Ese paternalismo que muchas veces se aplica cuando se habla de lo social», apuntó tras visitar la agencia de colocación.

En ella, los trabajadores de Vinjoy median con las empresas para que contraten a personas que se acercan hasta allí, no necesariamente tienen que ser discapacitados, y les aconsejan sobre las formación para obtener un puesto de acorde a sus peticiones.

No es el único servicio que se desarrolla en Vinjoy. Existen tres grandes líneas: la auditiva, donde ayudan a las personas con esta dispacacidad; la de ayuda a adolescentes en conflicto social; y la tercera, relacionada con otros proyectos sociales.

El compromiso del Gobierno del Principado con el programa auditivo estará vigente, al menos, hasta el año 2024. El Consejo de Gobierno renovó a finales de enero el convenio relacionado con el instrumental y Rivas agradeció ayer al presidente «haya puesto en el foco el tema social». «Este tema debe ser una prioridad y no un adorno», abundó antes de decir que durante la visita no le comentó la enorme lista de peticiones que tienen.

Lo hará en la próxima visita que el presidente del Ejecutivo regional realizará a las instalaciones de la fundación, en el monte Naranco. Aún no tiene fecha pero el presidente regional se comprometió a volver a lo largo de la legislatura que acabarán en 2023, ejercicio en el que volverá a haber elecciones.