A. ARCE
OVIEDO.
Miércoles, 4 de mayo 2022, 03:12
La resolución de Inspección de Trabajo que prohibe que los 155 obreros de la fábrica de armas de Trubia contratados a través de una empresa de trabajo temporal estén expuestos en los talleres de calderería y soldadura a agentes cancerígenos continúa levantando ampollas en la villa cañonera. También entre las propias secciones sindicales, que ya han comenzado a dejar constancia de sus discrepancias. Ayer, tras un pleno extraordinario del comité de empresa, las distintas facciones no lograron llegar a ningún acuerdo conjunto de cara a solicitar la vuelta de los compañeros cuyos contratos han sido rescindidos.
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Así lo explicó ayer el presidente del comité y portavoz de la Corriente Sindical de Izquierdas (CSI) al término de la reunión y de la posterior asamblea convocada en apoyo a los compañeros de ETT. «Nuestro sindicato lo que pide es que las incorporaciones a partir de ahora deben hacerse de acuerdo a ley y que lo lógico», advirtió, es que se produzca a través de contratos indefinidos de Santa Bárbara Sistemas. Por lo pronto, y a falta de que la empresa dé el próximo paso, «estamos planteando convocar paros en solitario».
Por ahora, Santa Bárbara ya ha comunicado a las secciones que se encuentra estudiando la manera de recuperar a los 155 despedidos, bien a través de incorporaciones directas o de subcontratar a una parte. «Lo que pedimos es empleo estable y de calidad», sentenció Coto.
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