Más de 300 personas se concentran para «salvar La Vega»

Mientras, al grito de «La Vega no se vende, La Vega se defiende», los ciudadanos de la capital asturiana aguantaron el chaparrón y clamaron contra «el destrozo del patrimonio industrial» de un conjunto que consideran «es único en España». «El problema es ese, que ellos no ven un conjunto arquitectónico, de patrimonio cultural e industrial, solo ven terrenos en los que edificar. Especulación urbanística», lamentó Flor Tejo.

Por su parte, la portavoz de Somos Oviedo, Ana Taboada, también defendió la causa. «Creemos que es absolutamente antidemocrático que se adopte una decisión de este calado en la cual hay muchísima gente en contra», a unos meses de las elecciones. Precisamente a «esperar a la cita de mayo» invitó Belén Suárez Prieto, candidata a las elecciones municipales, al Ayuntamiento de Oviedo. Así, el arquitecto Felipe Díaz-Miranda consideró que el protocolo es «absurdo e irracional para la ciudad de Oviedo», y que por ello, con concentraciones como la de esta mañana, están «tratando de reconducirlo».

Precisamente, desde la plataforma aseguran que «hemos conseguido dos hitos importantes» en estos meses de concentraciones y peticiones al Ayuntamiento y Principado. El primero, que no se construya, finalmente, la gran torre de veinticinco plantas. El segundo, que no se derriben los chalets. «Ahora, el tercer hito que tenemos que conseguir es que la autopista que atraviesa esta unidad espacial de un conjunto patrimonial importante se quite», concluyó Felipe Díaz-Miranda.

Tras algo más de media hora de reivindicación, los manifestantes emprendieron camino hacia el Ayuntamiento para «reivindicar también» en el Consistorio.