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A. ARCE / C. PÉREZ
OVIEDO.
Jueves, 4 de abril 2019, 01:58
Un frente de batalla secierra en el seno del centro comercial Modoodel Calatrava. Durante la jornada de ayer, trabajadores y gerencia de Telepizza, la «resistencia», ultimaron el desalojo del local que regentaron, desde el año 2014, Andrés García y Raquel González ... en la tercera planta de la superficie comercial. Se va, pero el Burger King se queda, solo; y se avecina otra tormenta bien distinta.
Al tiempo en que los dueños de la pizzería recogían apresurados sus últimos bártulos, Luis Antuña, propietario de la hamburguesería acompañó a un perito judicial, el arquitecto técnico e ingeniero técnico industrial José Piedra, a través de las distintas estancias de acceso al Burger, para que elabore un informe pericial sobre la seguridad de lo que queda del Modoo.
La gerente del Calatrava, Paloma Hernández, prohibió expresamente (a través de los efectivos del cuerpo de seguridad privada) que el perito realizase fotografías fuera de las dependencias de la hamburguesería. Sí pudo, sin embargo, hacer mediciones y recorrer todas las zonas. Piedra, por su parte, que nada más cruzar el umbral de la salida de emergencias convertida en puerta de acceso a Burger King al lado del cuarto de las basuras, comprobó, dijo, que no hay más de una salida de evacuación -haría falta otra más, según el perito-, que no funciona la luminaria permanente que señaliza el trayecto de salida en caso de emergencias, y tampoco se ha elaborado un plan de autoprotección y emergencias para las condiciones actuales, y «extraordinarias», de apertura del centro comercial, y «ni siquiera es accesible para personas con movilidad reducida» al estar desactivadas las escaleras mecánicas y ascensores. Sin embargo, sí funcionan las alarmas contra incendios y el trayecto de evacuación «tiene la anchura adecuada».
«Están jugando al desgaste con nosotros, pero no se dan cuenta que solamente con los pedidos a domicilio (más de 1.000 a la semana) cubrimos», declaró el propietario de Burger King, acompañado de otros miembros de la gerencia del negocio. Aun así, apostilló, «hemos perdido muchos clientes presenciales y hemos ganado otros que nunca antes habían pasado por aquí». Lo primero «es lógico», comentó, «la gente está perdida y ya ni hablemos del olor que hay en todo el pasillo de acceso».
El futuro del Modoo, sin embargo, permanece en el aire. La empresa, RPPSE Espacio Buenavista, gestionada por la inmobiliaria Estabona Management, aún no se ha pronunciado al respecto. Y es algo que al candidato del Grupo Municipal Popular a la Alcaldía, Alfredo Canteli, no termina de convencer. «Desconocemos lo que los nuevos propietarios pretenden hacer, pero sí tengo claro que si soy alcalde de Oviedo, el Calatrava será otro pulmón importante», expuso.
Por su parte, el candidato de Ciudadanos, Ignacio Cuesta, expresó que «esta es la crónica de un desastre anunciado» y exigió a la empresa que «dé explicaciones».
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