Oviedo exige al Principado una intervención inmediata en los terrenos del antiguo HUCA

Mientras tanto, el Gobierno del Principado sigue inmerso en el proceso de adjudicación del contrato de demoliciones, que comenzará a borrar de un plumazo a principios de año edificios que no tendrán una segunda vida en el plan de El Cristo como el antiguo Hospital General, el edificio Anexo A, Policlínicas –se libran los Hongos–, los polivalentes A, B y C, la nave de mantenimiento y las pasarelas de comunicación entre inmuebles.

Estos derribos costarán cerca de ocho millones de euros, habrán concluido para 2026 y dejarán un importante espacio libre a la espera del desarrollo de un plan especial que se negociará en la comisión bilateral, creada a principios de abril, entre el Principado y el Ayuntamiento.

Por su parte, la Universidad de Oviedo presentará a lo largo de este otoño el estudio técnico para la ampliación del campus de El Cristo. Conocido como 'Campus B', se trata de un proyecto de la institución académica que, con el beneplácito del Principado y del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones –propietario de una gran parte de los terrenos–, transformará los edificios de Maternidad, Consultas Externas y Silicosis en facultades.

Los planes pasan por crear un departamental y de laboratorios en Silicosis, un gran aulario en Maternidad y servicios comunes y administrativos para el conjunto del campus en Consultas Externas. La Universidad ve razonable inaugurarlo en 2030 o 2031.

La moción aprobada en comisión salió adelante de la mano del PP e IU, aunque con los votos en contra del PSOE y la abstención de Vox. En palabras del impulsor del texto, Gaspar Llamazares, se trata de, «ante la situación límite del viejo HUCA, adoptar iniciativas claras frente al Principado para que este asuma su responsabilidad, en colaboración con el resto de administraciones y en particular con el Ayuntamiento». Esto, agregó, «para que en la zona se preserve la seguridad de los vecinos, se garantice que no continúa el expolio en los antiguos centros sanitarios y, por otra parte, se lleve a cabo una labor de limpieza y salubridad» que mejoren la situación de la zona hasta el comienzo de las demoliciones.

Sobre el asunto también se pronunció la portavoz de Vox, Sonsoles Peralta. A pesar de su abstención, solicitó al equipo de gobierno local que inste a la Tesorería General de la Seguridad Social, al Principado y a la Universidad a presentar una denuncia ante los actos delictivos y vandálicos que se producen a diario en el viejo HUCA. «El abandono ha convertido la zona en un foco de inseguridad y vandalismo. En los últimos meses, los vecinos han alertado sobre la presencia de personas que acceden ilegalmente a los edificios» y estos actos, concluyó Peralta, «no sólo representan un daño significativo al patrimonio público, sino que, además, suponen un grave riesgo para la integridad física de las personas del entorno».