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ALBERTO ARCE
OVIEDO.
Sábado, 28 de agosto 2021, 01:35
Oviedo fue la única ciudad de todo el territorio asturiano en la que triunfó la sublevación militar franquista contra el Gobierno de la República en el mes de julio de 1936. Entre aquel cruento verano y el otoño del año siguiente, las tropas de ambos ... bandos pugnaron intensamente por el control del punto estratégico más importante de todos: el monte Naranco. De lo que fueron las heridas de la guerra, hoy, 85 años después, quedan cicatrices claramente reconocibles en forma de trincheras, nidos de ametralladora y más de un centenar de construcciones defensivas en lo largo y ancho del pulmón verde de la ciudad que ya no huelen a pólvora y en las que ya no resuena el sonido sordo de disparos. Solo tierra húmeda en las mañanas de niebla como la de ayer, en la que el alcalde, Alfredo Canteli, y el concejal de Economía, Javier Cuesta, se acercaron a la zona para destapar el trabajo que llevan realizando desde hace casi nueve mes los sesenta operarios y oficiales del plan de empleo municipal que han devuelto la vida y lavado la cara del monte. Una «hermosa realidad, hemos recuperado el Naranco», celebró el primer edil.
Pero el pasado bélico no es lo único que han rescatado del mar de helechos los trabajadores del Servicio de Empleo local. Lo explicó Valeriano Gil, el ingeniero de Caminos encargado del diseño completo del entramado de senderos de cien kilómetros recuperado para el deleite de locales y foráneos, áreas recreativas, señalética, fuentes y neveros. «Hemos recuperado seis itinerarios (la senda de los Neveros, Fuente de los Pastores, Peña Llampaya, Cama'l Moro, Trincheras del Pico Paisano y Circular del Naranco)». Todos ellos, explicó, están «interconectados», presentan un nivel bajo de dificultad para el senderista y arrojan toda la información histórica y geográfica gracias a un código QR en los letreros que traslada al usuario directamente a la página web,
En sus palabras, «ha sido un trabajo duro, sobre todo por las lluvias». Y es que, la humedad de este 'no verano' hace que «si te paras, ves crecer los helechos», bromeó el ingeniero. «Ahora hay que mantenerlo, porque a los tres meses un camino limpio vuelve a estar completamente tapado», advirtió.
El guante lo recogió rápidamente el primer edil, quien manifestó que «esto está hecho, ahora lo vamos a mantener, porque es fundamental, y ahora que disfruten los ovetenses y todos los asturianos». Fue más allá e incluso llegó a lanzar un pequeño dardo a la oposición al afirmar que «se habla mucho de recuperar el Naranco, pero se hizo muy poco hasta ahora».
Durante el paseo, Canteli y Cuesta se adentraron en el interior de las trincheras, custodiadas bajo la atenta mirada de El Cristo sobre la montaña, recorrieron en las furgonetas eléctricas de los operarios varios de los caminos y observaron las recién estrenadas áreas recreativas, palparon la cartelería que indica los tramos y se apoyaron a contemplar el paisaje sobre el vallado de más de un kilómetro en algunos de ellos. Los trabajadores entregarán la obra el próximo martes.
«Es muy bueno que Oviedo recupere este gran pulmón que tenemos aquí en el Naranco al cual yo tengo un especial cariño, porque llevo muchos años vinculado a través del Centro Asturiano, casi cuarenta, y a toda esta zona», matizó el líder del gobierno local. Por lo pronto, lo que toca ahora, señaló, será «disfrutarlo todos, los ovetenses y los turistas» y «cuidarlo para que no se nos venga abajo otra vez», concluyó Canteli.
Una vez entregado el proyecto y desmontada el área de casetas de obra en el aparcamiento del área recreativa bajo la escultura de 'El Tarangu', el Ayuntamiento, tal y como adelantó ayer el propio Javier Cuesta, iniciará un plan «extenso» de divulgación del monte entre la población más joven de la ciudad, con visitas de escolares de los centros del municipio que arrancarán una vez iniciado el nuevo curso, actividades culturales y citas deportivas, porque, la mejor forma de mantener un camino es cuando se pisa, se anda y se descubre.
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