«Nunca hemos ganado un contrato en Cataluña»

La misma fuente destacó que su «negocio» no es la fabricación, instalación o gestión del alumbrado público, a diferencia de las otras tres firmas expedientadas, y que el «90%» de su facturación es «privada».

El Tribunal Catalán de Defensa de la Competencia impuso sanciones de 56.000 y 167.000 euros para Boquet; 19.000 euros para Pascual de Diego; 57.000 para Llano y 267.000 para Aluvisa tras considerar probado que las cuatro firmas compartían información y pactaban las ofertas que presentaban a las licitaciones para predeterminar cuál de las cuatro ganaría el concurso. Llano destaca que nunca ganó un contrato en Cataluña, «como se puede comprobar fácilmente» y que apenas optó a algunas licitaciones hace años y solo coincidió con las sancionadas «en una», en Mataró.

La sanción recurrida que no comporta prohibición de contratación con el sector público. Un hecho que ha permitido, por ejemplo, la adjudicación a Aluvisa del contrato de control de tráfico bajo la lupa de la UDEF por su presunto amaño y que la firma se haya presentado a varias licitaciones más pendientes.

La Autoritat Catalana de la Competencia (ACCO) sostiene que las empresas pactaban las ofertas que presentaban para manipular los resultados finales y favorecer a una de ellas en concreto. El mismo sistema irregular se detectó en otras licitaciones públicas convocadas por los ayuntamientos de Mataró, Sabadell, Argentona y Vilassar de Mar, según la agencia pública.