ROSALÍA AGUDÍN
OVIEDO.
Martes, 10 de marzo 2020, 01:12
Diez y media de la mañana y la actividad en la residencia de Santa Teresa es frenética. A esa hora comenzó ayer el traslado de los nueve primeros usuarios a las instalaciones del Naranco. Son parte de los habitantes de la sexta planta. Duermen en ... ella 42 personas y, a partir de la próxima semana, se quedará vacía para ser reformada. El ERA, entidad liderada por Ana María Suárez Guerra, mejorará el suelo, las puertas, la pintura y las luminarias. Las obras durarán dos meses y medio.
Publicidad
En un principio, estaba previsto que fueran diez los usuarios que pasasen ayer su primera noche en las instalaciones del Naranco, pero una de ellas se puso enferma y tuvo que ser trasladada al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Eso sí, cuando le den el alta, irá directamente a la residencia situada al lado de la Fundación Vinjoy. «Durante más de un mes hemos gestionado el protocolo para este traslado y en los viajes utilizaremos tres medios de transporte», apuntó la directora de Santa Teresa, Fatima Iglesias, a las puertas de la residencia. Una ambulancia de Transinsa llevará a los usuarios más «dependientes», aquellos que «necesitan ir tumbados»; el resto viajarán en un minibús que tiene sitio reservado para sillas de ruedas.
En el tercer vehículo viajarán los «diversos enseres, equipos de respiración y el equipaje» de los usuarios. «Cada día y hasta el viernes haremos dos viajes: uno a las diez de la mañana y otro a las once y media», añadió Iglesias, que coordinó todos los viajes a pie de calle. También estuvieron Marta Fernández Bermúdez, responsable asistencial, y la trabajadora social Graciela Fernández.
Fernández apuntó que durante el periplo, de unos tres kilómetros, los pacientes no van solos. Van acompañados por enfermeras y auxiliares, y parte del personal se quedará allí durante el tiempo que duren las obras. La plantilla de las enfermeras aumentará en tres personas hasta llegar a las siete. El número de auxiliares se incrementará hasta llegar a las 59, de las cuales una veintena será personal de Santa Teresa.
Los usuarios tendrán el privilegio de estrenar sus habitaciones. La residencia del Naranco reabrió sus puertas hace un año, tras el cierre en 2013 a causa de su deficiente estado de conservación; hasta el domingo tenía un centenar de usuarios. Esta cifra crecerá en los próximos días en 42, y con esta llegada se abrirán las dos plantas que aún permanecen cerradas.
Publicidad
En total, este centro dispone de 166 plazas, y una de sus particularidades es que tiene habitaciones dobles y simples. Además, sus instalaciones cuentan con peluquería, cafetería y todos los servicios esenciales para los residentes como, por ejemplo, fisioterapia.
Durante el traslado se tomaron medidas extra de higiene a causa del coronavirus. Todos los usuarios lavaron sus manos antes de salir de la residencia, gracias a los recipientes situados en diversos puntos del centro. Además, se están llevando a cabo labores de registro de las personas que entran y salen.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.