Una noche única con 'The Boss' en la sala Gong

Una noche irrepetible en la mítica sala Gong Galaxy Club. Este sábado, a las 21 horas, la 'G Street Band', que toma su nombre de la 'E Street band' que acompaña al reconocido cantante, harán vibrar al público con las canciones de 'The Boss'. Como cada año, desde 2018, un grupo de músicos asturianos se reunirán, junto a un puñado de selectos invitados, para celebrar su ya tradicional homenaje a Bruce Springsteen bajo el título 'An evening with Bruce Springsteen'. La entrada, 12 euros.

Dos horas y media de canciones en las que «cada año introducimos algún cambio, alguna sorpresa, alguna cara B», explica Ángel Miguel, uno de los impulsores del evento y uno de los músicos que se subirá al escenario durante el concierto homenaje. «Habrá alguna sorpresa para el fan más selecto, pero no faltarán grandes éxitos como 'The River', 'Born in the USA' o 'Dancing in the dark'», añade.

Eso sí, la clave es mantener el espíritu con el que nació la idea: «Surgió en el antiguo Gong, que estaba en la calle Martínez Vigil, nos reuníamos para hacer 'Jam Sessions'», recuerda, unas sesiones en las que tocaban canciones que preparaban durante la semana. «Hicimos algunas temáticas, dedicadas a artistas como 'Queen' o 'Bruce' y tanto disfrutamos la de 'The Boss' que decidimos que nos íbamos a reunir una vez al año para repetir la experiencia».

Músicos como Álvaro Bárcena, Alejandro Blanco, Carrie Mittleman, Sam Rodríguez, Ángel Miguel, Tomás Azpiri y Antón Ceballos, estarán este sábado sobre el escenario acompañados de algunos invitados sorpresa que se sumarán y saldrán a tocar en alguna canción, que es la manera de «preservar un poco esa sensación de 'Jam Session'», afirma. Precisamente por este motivo, ensayan cuando se acerca la fecha del evento, pero lo hacen una sola vez «para que las canciones mantengan esa frescura y esa ilusión de tocarla».

La sala Gong Galaxy Club, que cuenta con un aforo de unas 200 personas, es el lugar perfecto para disfrutar de las grandes canciones del Boss de forma íntima y personal, en un recorrido histórico a través de toda su obra.

Es un concierto que no se toca en ningún sitio, una sola noche en la que la conocida sala ovetense suele colgar el cartel de completo, porque «el que viene un año, repite», algo que no es de extrañar porque como bien la define Ángel Miguel «es una fiesta en la que nos reunimos cada año para disfrutar todos, tanto el público como la banda», concluye el músico.