El Ministerio del Interior invertirá 1,7 millones en obras en el cuartel de la Guardia Civil de Rubín

El cuartel está a punto de cumplir treinta años desde su puesta en marcha. Ubicado sobre los terrenos del antiguo acuartelamiento militar, fue inaugurado el 16 de abril de 1993 en un acto al que asistieron autoridades de diferentes estamentos: civiles, militares y religiosas. Entre ellos estuvieron José Luis Corcuera como ministro del Interior, Gabino de Lorenzo como el alcalde de Oviedo y Gabino Díaz Merchán siendo arzobispo, quien, durante la misa ensalzó esta construcción del cuartel. De aquella, 140 de las 162 viviendas construidas ya estaban ocupadas en la parcela junto a las dependencias administrativas de la Guardia Civil y las oficinas de Tráfico.

Sin embargo, con el paso del tiempo, han surgido los problemas: «El material usado no está bien cocido y se desprende», ocurre tanto en las oficinas como en las viviendas.

Los desperfectos se fueron arreglando poco a poco. Con esta intervención general se quitará el techo para después poner una red y volver a colocar la cubierta. «Son unas obras engorrosas, molestas que durarán dieciocho meses», cuantificó Almiñana después de que la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, anunciase en su última visita a Asturias unas obras de acondicionamiento de las dependencias de Rubín.

Se actuará de forma individualizada en cada una de las viviendas, oficinas y el garaje. «Se intervendrá en todo el cuartel antes de que se produzcan nuevas rupturas» y sus posteriores desprendimientos, explicó Almiñana.

Estas no serán las únicas obras que en dependencias de la Guardia Civil en Asturias. En febrero comenzó la construcción de un nuevo cuartel de Mieres. Con una inversión que asciende a 3,5 millones de euros, se levantarán dos edificios, uno con diez viviendas y otro para los servicios operativos.

Los trabajos se ejecutarán sobre la parcela del antiguo cuartel y contará con un sótano de más de mil metros cuadrados, para las cocheras (con capacidad para 22 coches patrulla y ocho motos), vestuarios y almacenes. La planta baja, con unos 300 metros cuadrados, albergará las oficinas de atención al público. En la primera planta (unos 370 metros) se habilitarán las diferentes dependencias internas del cuerpo, como oficinas, despachos para las diferentes unidades. La distribución para las viviendas de los agentes se abordará con una altura más y en una parte diferente del edificio. En el sótano se reservarán garajes para coches particulares.

También sigue adelante el proyecto para la construcción del nuevo cuartel en Pravia, aunque todavía no existe fecha de inicio de las obras. La directora general de la Guardia Civil prometió que se realizarán próximamente, después de que en 2019 el Ministerio del Interior contactase con el Ayuntamiento para conocer al detalle las características de la finca en la que se asienta el cuartel de la Guardia Civil y saber si sería posible construir en la misma parcela uno nuevo. La oficina técnica del Ayuntamiento emitió un informe favorable y ahora se espera a la puesta de la primera piedra.

Estas dos últimas obras suman una inversión de 1,8 millones de euros a costear por las arcas estatales.

Por otro lado está pendiente la construcción de unas nuevas instalaciones en el municipio de Llanera, que necesitan una renovación, si bien por el momento no tienen fecha de ejecución.