R. AGUDÍN
OVIEDO.
Viernes, 26 de febrero 2021, 01:33
Conchita Quirós se dejaba querer. Siempre estaba dispuesta a colaborar al entender que la Librería Cervantes era algo más que vender libros. Apoyó de forma acérrima a los nuevos escritores y a las pequeñas editoriales, y su presencia estaba asegurada en los ... actos organizados por la Red Municipal de Bibliotecas. La última vez fue hace una semana, cuando no perdió detalle de la presentación telemática del título 'Hierba mora' de Teresa Moure.
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Su legado estará presente el 23 de abril. El presidente de la Fundación Municipal de Cultura, José Luis Costillas, planea hacerle un homenaje para el Día Internacional del Libro. El formato aún está aún por definir, pero el Ayuntamiento quiere recordarla como el icono cultural que era: «Se merece todos los homenajes porque ha dejado un legado eterno».
Convirtió su negocio en un «referente nacional» con innovaciones como la creación de la primera página web de una librería o la retirada de los mostradores de la tienda para que los clientes pudiesen tocar y ojear los libros: «Conchita Quirós era un ejemplo de mujer emprendedora, luchadora y adelantada a su tiempo. Su librería es un escaparate para los mejores escritores». Tanto amaba los libros que hasta el último día tuvo uno en sus manos y confesaba que se había casado con la literatura.
Cada hoja era una historia diferente con la que echaba la mente a volar. Tanto le gustaba esta sensación que fue una de las fundadoras de LibrOviedo, donde los autores comparten charlas con sus lectores y se pueden encontrar miles de libros diferentes. «Le realizaremos un homenaje en la feria de este año que creo que podremos celebrar. Estará de esta forma presente», destacó ayer la presidenta de la Asociación de Libreros de Oviedo y dueña de la librería Reconquista, Mar Prieto.
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Las reuniones de organización para preparar la feria, que será del 9 al 20 de junio en la plaza de Trascorrales, comenzaron esta semana, justo antes del fallecimiento de Quirós. Ahí se habló de hacerle un homenaje al también librero Alberto Polledo, fallecido en diciembre.
Huérfanos se quedan los compañeros del gremio porque Conchita Quirós era su «referente». «Una mujer soñadora, luchadora y trabajadora que continuó el legado de su padre, quien fundó la librería hace ahora cien años». Un centenario que, sin duda alguna, le dedicarán.
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