«Es muy injusto, nos cierran por no tener una puerta directa a la calle»

Las tiendas esenciales de los centros comerciales pueden abrir hoy, no así otros negocios del interior ante las nuevas restricciones para paliar los efectos de la tercera ola de la pandemia. En Oviedo, se ven afectados los pequeños empresarios de Los Prados, Centro Cívico y Salesas. Aunque conscientes de que lo primero «es la salud», consideran «muy injusto» el cese temporal de su actividad por «no tener una puerta directa a la calle».

Así lo explicó ayer Silvino Calvo, de la tienda Akebia en Salesas, quien calificó como «inviable» la situación. Bajan la persiana por tercera vez en menos de un año, solo catorce días después del inicio de rebajas: «Ahora que se podía vender un poco, nos mandan para casa. Económicamente nos parte a la mitad».

Verónica González, de Bagatela, defiende que Los Prados «no es un centro comercial con multitudes». Al mediodía de ayer no había aglomeraciones en los pasillos y en su tienda tan solo dos personas: «Es muy injusto porque nos cierran por estar dentro de una superficie. En el centro las tiendas seguirán abiertas», comparó.

Frente a su negocio se instaló en diciembre María Córdoba. Vende gorros, bufandas y chaquetas de lana que antes comercializaba en los mercadillos, pero que fueron cancelados por la covid-19. Se lanzó a innovar: «Me instalé aquí hace un mes, pero ahora toca guardar toda la mercancía. Mientras, hay que seguir pagando todo y yo tengo tres hijas pequeñas».

Ana Rodríguez, de la floristería del Centro Cívico, ha rechazado ya traer flores especiales para San Valentín para no tener las pérdidas que registró por el Día de Todos los Santos, mientras que en Pisamonas seguirán con la venta online.