Identificados los autores de un caso de bullying en Oviedo

A pesar de los esfuerzos, recientemente ha corrido como la pólvora una grabación a través de las redes sociales en la que aparece un menor rodeado por un grupo de jóvenes que terminan, presuntamente, dándole patadas después de que este, de espaldas a la cámara y agachado, acercase su cara a los zapatos de varios de ellos. La respuesta de las autoridades no se ha hecho esperar y la Policía Nacional ya ha identificado a los supuestos agresores, a los que ha estado tomando declaración entre las jornadas de ayer y anteayer.

Así lo confirmaron a este diario fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Asturias, en coordinación con la Fiscalía y la autoridad judicial. En ese sentido, las labores de identificación no se han limitado únicamente a los presuntos agresores que aparecen el vídeo viral, sino también a algunos de los encargados de difundirlo a través de sus perfiles en las redes sociales o aplicaciones de mensajería.

Por su parte, la Sección de Menores de la Fiscalía del Principado de Asturias ya ha abierto unas diligencias de investigación por el presunto caso de bullying al adolescente. Sus agresores, al parecer, son «otros menores», tal y como adelantaron fuentes del Ministerio Fiscal a través de un comunicado de prensa. La agresión, continuaron, «fue grabada y difundida por redes sociales, haciéndose viral en pocas horas».

Tras incoar las diligencias, la Fiscalía dio traslado de las mismas al Cuerpo Nacional de Policía para la identificación de los autores de la agresión y la grabación de las imágenes.

Una vez recibido el atestado policial, señalaron las mismas fuentes, «se iniciará el correspondiente expediente para determinar las posibles consecuencias penales de los hechos». Y es que, si bien existen distintos tipos de bullying, el acoso escolar puede llegar a constituir un delito de lesiones, amenazas, coacciones, injurias, calumnias, agresiones o hasta abusos sexuales.

Algunos centros escolares de la ciudad se pusieron rápidamente a disposición de los agentes de la Policía Nacional, a la par que distintos equipos directivos salieron a condenar su contenido de inmediato. Los hechos, según abundaron desde un colegio, se produjeron «fuera del horario escolar y de las instalaciones del centro» pero «estaremos siempre del lado del agredido, nos apena que a nivel de sociedad no acertemos en la educación», habían lamentado.