Ana Isabel Balbín es presidenta de la Asociación de vecinos de El Fontán. En esta entrevista responde a los hosteleros que acusan a las asociaciones del Oviedo Antiguo de arrogarse la representación sin que se conozca, según ellos, el número de representados de las citadas ... asociaciones.
-El presidente de la junta local de Otea dice que no sabe cuál es la representación real de las asociaciones de vecinos del Antiguo, mientras que ellos están contados.
-Eso no es cierto porque estamos registrados y se conoce cuántos somos. Que acceda al registro, es público. El Principado nos exige registrar los que pagan y los que no pagan. Somos 35 y somos los de la plaza porticada y me importa poco lo que digan David González Codón o José Luis Álvarez Almeida.
-¿Sigue habiendo problemas de ruidos?
-La realidad es que la gente se está yendo del barrio por la contaminación acústica y se está alquilando todo a vivienda vacacional. Al final quedarán cuatro en el barrio. No todo puede ser hostelería porque es abusiva. No nos importa lo que diga Otea porque solo representa a unos cuantos. Si no les gusta lo que opinamos, nos da igual porque somos los que vivimos aquí. Cada uno defiende sus derechos.
-Cada vez hay menos «movida» nocturna.
-Movida nocturna hay menos, eso es verdad, pero es que Oviedo no es la misma que era, un Oviedo estudiantil. Ahora es muy diferente; a lo mejor lo que se necesitaba era un turismo más cultural y no de copas nocturnas porque quién puede vivir en la calle Mon que por las mañanas de los domingos parece una zona de guerra. Yo vivo en El Fontán que ahora es lo poco que se puede enseñar del Oviedo Antiguo.
-¿Qué le parece la nueva ordenanza de terrazas?
-Los hosteleros querían poner unos estandartes (toldos a dos aguas) y quieren convertir Oviedo en Benidorm o Salou, pero el de Oviedo es un turismo diferente, más selectivo, más cultural. Los hosteleros lo que pretenden no es más que privatizar el dominio público. La nueva ordenanza me parece mal, no lo he dicho yo, también lo ha dicho la Consejería de Cultura. La verdad es que al Ayuntamiento y a los hosteleros les importamos muy poco los vecinos. Están a tiempo de rectificar porque aún les quedan unos meses para las elecciones.
-Se la ve enfadada .
-No es mosqueo, es cansancio. Llevamos años con esto y una se cansa de tener que responder siempre a las mismas acusaciones que nos repiten constantemente.
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