El edificio entre Uría e Independencia se reformará para uso exclusivo de viviendas

Construido en 1925, el edificio ubicado en la esquina de las calles Uría e Independencia será reformado por la propiedad para destinarlo a viviendas. La empresa Peralte lo remodelará próximamente, manteniendo en sus bajos tiendas emblemáticas de la ciudad, con las joyerías La Perla y Otero y las zapaterías Alcalá y Pazo.

Este inmueble, catalogado con el nivel de protección P1 y que consta de cinco plantas, fue diseñado por el arquitecto Benigno Rodríguez. Durante sus más de noventa años de historia ha sufrido dos reformas de calado. La primera se acometió para adaptar dos viviendas por planta a un hotel. Durante los trabajos se retabicaron los pisos para convertirlos en diferentes habitaciones, con dos pasillos en forma de ángulo como nexo de unión. Estas obras afectaron a todas las plantas excepto la última, que mantuvo su función residencial. En la segunda intervención se mejoraron los bajos y el entresuelo del chaflán para adaptarlos a locales comerciales, tal y como aparece recogido en la ficha urbanística del Catálogo municipal.

El estado del inmueble es, en general, bueno. No presenta grietas ni deformaciones y la fachada ha sido pintada recientemente en unas tonalidades marrones. Tanto las carpinterías como los elementos decorativos y las fachadas del patrio interior no sufren desperfectos destacables y la cubierta «no presenta deterioros visibles».

Este edificio tiene un uso residencial y en su interior puede albergar oficinas, pisos y un hotel. En las plantas bajas y en la primera se permite la instalación de comercios, restaurantes y salas de reuniones, siempre y cuando integren un mismo local.

Esta será la segunda reforma de calado que se acomete en la calle Uría en menos de tres años. El número 58 fue reconstruido tras el incendio del 7 de abril de 2016. A escasos metros, en la parte alta de esta vía, aún permanece vacío el solar número 74 tras el derribo del edificio.