El Consejo del Fontán niega presiones por parte del PP

El clima de la reforma del mercado del Fontán es cada vez más tenso. El lunes, los 33 socios con derecho a voto de los 45 comerciantes con hueco en la plaza decidirán en la sede de la FAC si quieren o no que el Ayuntamiento reforme el edificio, con lo que ganará una planta con tres restaurantes y una sala polivalente. Una hora antes de la votación, a las 16.30 horas, han sido citados por el alcalde en el salón de Plenos para explicarles personalmente el proyecto, algo que el sector crítico de los comerciantes calificó anteayer de «amenaza y coacción». Por si fuera poco, las cosas se torcieron aún más ayer después de que el Consejo de administración del mercado saliese a negar, a través de un comunicado, cualquier tipo de presión municipal.

Todo lo contrario. Acusan al «grupo opositor» de presionar a través de un burofax «en el que se trata de hacer responsable al propio Consejo y a la gerencia si el proyecto sigue adelante, olvidándose de que será la propia junta general la que, a través de la votación, manifieste su acuerdo o desacuerdo con el proyecto».

Van más allá y califican de «totalmente falso» que se hayan recibido presiones por parte del PP para forzar la dimisión del Consejo y, a tenor de la denuncia de los críticos por la reunión convocada por el alcalde apenas una hora antes de las votaciones, sostienen que se trata de algo «positivo» para «aclarar cuantas dudas» sea necesario. También advierten, en ese sentido, que fue el propio sector crítico el que solicitó públicamente una reunión con el alcalde el pasado día 7.

Sobre este asunto el portavoz del PSOE, Carlos Fernández Llaneza, se preguntaba ayer «¿dónde estaba Canteli para aclarar dudas durante estos tres años?», el tiempo que lleva en marcha el proyecto. «Oviedo no se merece un alcalde que se dedique a llamar ‘ciegos’ a los concesionarios del mercado mientras pone en riesgo 2,4 millones de fondos públicos», criticó.