El Carlos Tartiere estrena el nuevo rótulo luminoso de la fachada sur

No es un detalle menor. Sustituir el desvencijado letrero habla del intento del equipo de gobierno por guardar buenas relaciones con el club enseña de la ciudad y complementa a la firma del convenio de patrocinio y al acuerdo para la cesión de las marcas de la entidad deportiva.

Tras desbloquear el asunto de las marcas, por las que el club abonará 240.000 euros durante las próximas seis temporadas más los adeudos desde que venciera el anterior, en 2017; la semana pasada se desbloqueó el contrato de patrocinio por el que el Ayuntamiento abonará 1,18 millones de euros durante los próximos tres años a cambio de lucir el nombre de la ciudad en la elástica oviedista.

No sin polémica. La rúbrica del acuerdo puso fin a una disputa soterrada. Para la camiseta, el equipo de gobierno se inclinaba por el lema 'Oviedo, capital del paraíso'. Justo el mismo que el Ayuntamiento pagó generosamente en 2003 para que lo luciera la camiseta del Oviedo ACF, el equipo promocionado por Gabino de Lorenzo para reemplazar a un Real Oviedo ahogado de deudas, descendido a Tercera y sancionado con menos seis puntos. Al Real Oviedo, que sobrevivió a aquel intento de usurpación, no le gustaba el lema y a la afición azul tampoco. Al final, ganaron.

La próxima actuación esperable en el municipal será otra de las aspiraciones de la entidad. Teñir los asientos de azul. Si se siguen los pasos dados con el césped el pasado agosto, cuando el Real Oviedo acometió las mejoras, será la propia entidad quien corra con la inversión.

A la inauguración acudieron el alcalde, Alfredo Canteli y el concejal de Infraestructuras, Nacho Cuesta. Por parte del Real Oviedo asistieron Fernando Corral, César Martín y Federico González.