«Es una de las calles más bonitas de Oviedo»

Es habitual ver pasear por la calle González del Valle a los pavos reales del Campo San Francisco. Estos animales son unos enamorados del jardín del Banco de España. En un primer momento, esta vía que recibió su nombre en 1887 en homenaje a Anselmo González del Valle y Fernández Roces, contaba con el tramo que une Uría con Marqués de Pidal; sin embargo, en 1952 se esbozó su prolongación hasta la calle conocida hoy como Plácido Arango y se peatonalizó en 1983.

Una de las fieles a esta calle es Sandra Pérez López. Aunque San and Coco lleva abierta desde 2015, ya en 2008 «tenía otra tienda en esta calle, mucho más pequeña». Más tarde este local, que es mucho más grande, se quedó libre y se mudó. «Es una de las calles más bonitas de Oviedo», elogia.

Le encanta pero reconoce que «no es la calle más comercial. Tenemos al lado Gil de Jaz, que lo es mucho más». Cuenta que han abierto cafeterías y cuando hace buen tiempo las terrazas están llenas. En su caso, además, atrae a un público muy amplio: desde adolescentes hasta mujeres de setenta y muchos. Y de diversas procedencias: al estar en el centro acude «gente de Oviedo y de otros puntos de Asturias».

El conocido modisto Josechu Santana y su mujer, la diseñadora María Argüelles, abrieron hace un año 'De boda con María' porque tener «un escaparate nos pareció interesante para relanzar la marca», explica Santana. Precisamente para lo que ellos tenían en mente, «trabajar de una forma muy personalizada», esta calle les pareció perfecta: «Es bastante céntrica pero no excesivamente comercial».

Sus años de experiencia en comercio, «desde 1981 estoy de cara al público», le han mostrado «un fenómeno muy curioso en todas las ciudades: las calles que solo tienen una acera son menos comerciales». Quizá por ello no es tan comercial como Gil de Jaz o Uría, «pero está muy cerca y hay que ser realista, no pagas lo mismo».

Es una calle que recomendaría «para creativos, diseñadores o gente que quiera montar pequeños negocios». Se forman «sinergias» ya que hay muchos locales del sector nupcial: floristerías, moda, peluquerías.... «Es un barrio con ese tipo de comercio, hay de todo pero también tiendas que hacemos alta costura», recalca.

Justo al lado se encuentra uno de los locales más nuevos, Agencia 23. Abrió sus puertas en marzo: «Elegimos esta calle por ubicación, porque está en el centro y cerca del Parque San Francisco y Uría», explica Juan José Sáenz de Baranda. Por el momento están muy contentos a pesar de que «teníamos un poco de miedo porque era peatonal». Sin embargo, aunque es «un arma de doble filo», principalmente para su actividad, destaca que «tiene muchísimo paso».

Hace nueve años que Begoña Rodríguez Merás puso en marcha su peluquería. La consideró «una calle comercial para novias» y su negocio está muy vinculado al sector nupcial. De hecho, señala que «las casas de novias atraen muchos clientes, aunque también lo hace El Corte Inglés».

Desde la experiencia, indica que «es una buena calle, sobre todo para peluquería porque está muy céntrica». Además, cuentan con una «clientela muy fiel, gente del barrio y también viene gente de fuera». Por tanto, tiene claro que la recomendaría a nivel comercial. No hay más que ver que «no suele haber mucha rotación de negocios, las tiendas de aquí llevan muchos años», concluye.

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