A. Arce / R. Agudín
Jueves, 22 de febrero 2024, 22:24
La Policía Local y los bomberos precintaron a finales de enero los accesos al número 31 de la calle Nicolás Soria, un conocido punto negro de la okupación ilegal en Ciudad Naranco, después de que la propiedad, la Sareb (Sociedad de Gestión de Activos Procedentes ... de la Reestructuración Bancaria), se encontrase con la puerta forzada, cerrada a cal y canto, y con una cadena que impedía el paso. En su interior, varios inquilinos que se habían establecido en las viviendas del inmueble de forma permanente. Este jueves la escena ha vuelto a repetirse. Tras la vuelta de los okupas al inmueble, varias dotaciones de Seguridad Ciudadana tuvieron que tapiar los accesos de nuevo.
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Según las fuentes policiales consultadas, los okupas habían destrozado los tablones con los que los agentes habían cerrado previamente el acceso para entrar de nuevo al edificio y cerraron el portal con un candado para usarlo a su antojo. La intervención, que ha tenido lugar pasadas las ocho de la tarde, consistió en la realización de una comprobación rápida del interior del inmueble, que se encontraba vacío en ese momento, y en reponer los tablones para cortar el paso a moradores ilegales.
Si de algo sabe Ciudad Naranco, precisamente, es de okupas que vuelven una y otra vez a acceder a las mismas propiedades por mucho que la Policía ya haya tomado cartas en el asunto. Una calle más abajo, en Almacenes Industriales, se han sucedido los incendios en las naves abandonadas a lo largo de los últimos meses. El Ayuntamiento ha comenzado a tomar cartas en el asunto.
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