La bioincubadora de alta tecnología irá al Vivarium de La Corredoria

De esta forma, se descarta la idea originaria de julio de 2022 de que a la nave de Cañones -que adquirirá el Principado por 4,5 millones- irá este proyecto. Dos factores han obligado a cambiar la decisión. Por un lado, aún no se ha firmado el convenio y los tiempos apremian; el periodo de ejecución de la ayuda abarca hasta 2026. Por el otro, el alto coste de reforma del taller diseñado por Ildefonso Sánchez del Río -con 4.949 metros cuadrados- para convertirlo en la sede de una quincena de empresas se prevé muy por encima de los 2 millones de euros.

Esta situación obligó a las administraciones a analizar nuevos emplazamientos y desde el principio, el Vivarium de La Corredoria estaba muy bien posicionada: «Inicialmente estas instalaciones irán allí», añadió el primer edil quien también incidió en que una parte de las tres plantas de la galería comercial del Calatrava irá destinada a emprendedores. «Estamos muy a punto de cerrar el acuerdo de compra con lo que generaremos muchos espacios para complementar al Talud de la Ería en la ayuda a la creación de empresas y la generación de empleo».

Este nuevo espacio de coworking , sin embargo, no está tan definido como el primero. Ya está claro que irá destinado a empresas del sector sanitario incrementando así la importancia la 'milla de la bata blanca' donde se engloba al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), el Vivarium, el Instituto de Investigaciones Sanitarias del Principado de Asturias (ISPA) y próximamente, el Instituto de Productos Lácteos (IPLA); así como las empresas que se dedican al desarrollo de investigaciones relacionadas con las enfermedades.

Tal es la relevancia de este sector en Asturias, que la Fundación Incyde calificó como su importancia una fortaleza a la hora de estudiar la candidatura presentada por Agencia de Ciencia, Competitividad Empresarial e Innovación Asturiana para optar a esta ayuda de 2 millones. No obstante, esta no era su única ventaja. También se valoró de forma muy positiva «la naturaleza, el alcance y la eficiencia de los medios que se proponen para asegurar la inmersión en innovación de las micropymes incubadas», así como la «capacidad de las entidades del clúster para posibilitar o ayudar a las empresas incubadas a acceder a ámbitos de colaboración con terceros, generar sinergias y colaboraciones con otras entidades».

Es por ello que esta bioincubadora generará un «impacto positivo en el desarrollo económico, social y ambiental de Asturias y de la UE en su conjunto» y «brindará apoyo a emprendedores para la creación, puesta en marcha, crecimiento y desarrollo de empresas de base tecnológico así como el apoyo que se dará a la internacionalización de las empresas», según aparece reflejado en la resolución de la Fundación Incyde.

A pesar de que la bioincubadora se caiga del futuro de La Vega, el sector sanitario sigue muy presente en los planes del Ayuntamiento para la fábrica de armas. En la última reunión presencial y pública que mantuvo hace un mes con el presidente regional, Adrián Barbón, le ofreció el castillo de entrada como sede de la Agencia de Salud Pública: «Esta es una gran construcción con muchos metros y sería un sitio ideal para que se instalara ahí este órgano».

Una opinión compartida por el líder del Ejecutivo, quien aprovechó la visita del presidente Pedro Sánchez hace quince días al HUCA para exponer los planes; sin embargo, no hubo respuesta. La Agencia de Salud Pública es aún un órgano en creación y, a pesar de su apuesta, Canteli, no se muestra muy confiado de que Oviedo será la ganadora: «Tengo poca confianza porque es un camino difícil en el que hay que estar muy encima» y es por ello que «luchará a muerte por conseguirlo».