El Ayuntamiento de Oviedo y un fondo suizo negocian una solución para el centro comercial del Calatrava

Las reuniones son «constantes» y tienen sobre la mesa la opción de relanzar el espacio como recinto ferial anejo al Palacio de Congresos

ALBERTO ARCE

OVIEDO.

Viernes, 15 de octubre 2021, 01:21

De los 9,1 millones de agujero que dejó Estabona en las cuentas de RPPSE Espacio Oviedo, el centro comercial del Calatrava, algo más de dos se le deben al Ayuntamiento en concepto de impuestos atrasados; y cuatro al fondo Varia Structured Opportunities, ... propiedad del gigante inmobiliario suizo Stoneweg, como resultado de un crédito solicitado por la gestora fallida antes del estallido de la crisis sanitaria para reconvertirlo en un centro de ocio familiar. Tras declararse en concurso de acreedores, la galería de Buenavista salió a la venta directa hace seis meses sin precio mínimo, pero con una tasación de la administración que lo colocaba en 10,2 millones de euros -diez veces menos que en el momento de su inauguración-; no obstante, ese proceso ha fracasado al no aparecer ningún inversor dispuesto a adquirir el activo. Así, tal y como permitía el auto del juzgado madrileño de lo Mercantil, serán los suizos quienes se hagan cargo ahora de esos malogrados 40.000 metros cuadrados, cerrados a la actividad económica desde 2019, y quienes deban hacer frente a la deuda con el Consistorio. Eso sí, pretenden ir un paso más allá y ya han comenzado un intenso periplo de reuniones con el equipo de gobierno local para alcanzar una «solución conjunta» capaz de relanzar el espacio, según confirmaron a EL COMERCIO fuentes de la operación.

«Las conversaciones y las reuniones entre los dos principales acreedores son permanentes, constantes y muy fluidas. Se está intentando buscar la mejor de las soluciones», aseguraron a este diario. En ese sentido, Stoneweg, que opera también en España, y el gobierno local, se encuentran tratando de idear un plan capaz de volver a abrir las puertas del Calatrava dos años después de su cierre comercial definitivo (a excepción del proceso judicial que permitió a Burger King permanecer abierto en el interior hasta hace unos pocos meses). «Están buscando una solución entre los dos, porque no tiene ningún sentido que cada uno vaya por un lado. Se está trabajando y se está trabajando bien», valoraron las mismas fuentes. Esto es, reiteraron, «trabajo conjunto, permanente y constante, y mucha colaboración», sentenciaron.

Las alternativas

Sobre la mesa hay pocas opciones que pudiesen resultar ganadoras si de lo que se trata es de reactivar uno de los peores fracasos en la historia local de los centros comerciales. Tal y como había adelantado este diario en abril, una de las posibilidades que barajaba el equipo de gobierno era la de adquirir el espacio para crear un recinto ferial anejo al Palacio de Congresos «a coste cero». Al menos, un cero matizable que pudiese resultar de la renuncia a su parte de la deuda, ahora a conveniar con los intereses de Stoneweg. Las mismas fuentes confirmaron que la posibilidad del recinto ferial «podría ser», aunque todavía se está en una fase muy temprana del proceso. Lo que sí es cierto es que la propia Cámara de Comercio había aplaudido la idea y se había ofrecido para gestionar la iniciativa si finalmente el Consistorio optaba por dar el paso.

Por otro lado, está el plan de reforma que había comenzado a idear Estabona antes de que la pandemia irrumpiese en el terreno económico con una virulencia sin precedentes. La gestora aspiraba a convertir la galería del Calatrava en un centro de ocio gracias a una remodelación de 12,5 millones de euros -de la que solo llegaron a ejecutarse cerca de 217.000- y a una inversión paralela de algo más de 11 millones.