Alfredo Canteli | Alcalde de Oviedo

«La Vega debe empezar a tener algo de vida en un año y medio, aunque podemos adelantarlo»

–Aseguró esta semana, tras el Pleno pedido por el PSOE, que usted no miente pero sí se calla cosas...

–Claro que me callo cosas a veces, pero yo creo que como todo el mundo. Pero no sé mentir.

–¿Cuáles son las condiciones del posible pacto con IU?

–Es un pacto fácil y que beneficia a los ovetenses. Yo pacto con aquellas personas que quieren pactar y cuando un partido viene dispuesto a ayudar, claro que pacto. Hablamos mucho de esas 170.000 viviendas que prometió a nivel nacional Pedro Sánchez. Es decir, si lo trasladamos a Oviedo, tocan unas 700 y no se hizo ninguna. Y si un partido viene a decirte por qué no colaboramos, por qué no cedéis los terrenos, e intentamos hacer las 200 o 300 viviendas, aquí me tendrán.

–¿Dónde están esos terrenos para construir las viviendas?

–Tenemos terrenos en varios sitios. Las construiremos en una zona buena de Oviedo. Por ejemplo, entre La Florida y Las Campas tenemos bastante terreno edificable. Lo importante es que se hagan viviendas en Oviedo de precio asequible y que resuelvan mucho los problemas que tiene Oviedo en este momento, que está creciendo en población y que las necesidades permanentemente están surgiendo.

–¿Y los acuerdos sobre las fiestas de San mateo?

–En San Mateo hay temas que ya no se pueden cambiar. Los chiringuitos tradicionales no van a volver mientras yo sea alcalde. Y eso lo saben ellos. Ahora, hay cosas que se pueden hacer y que nosotros decimos que tenemos que verlo. Nosotros no nos podemos negar a la evolución, venga de quien venga. Yo los veo en una línea de colaboración, no de poner barreras.

–¿Es un pacto para el sí de IU o para la abstención?, ¿que le dice su olfato?

–Pues no lo sé, de verdad no sé. Por supuesto, espero que no voten negativamente al presupuesto. Sería un paso importante el que apoyaran el presupuesto, que son unos buenos presupuestos para Oviedo, donde el tema social es muy importante. Somos partidos diferentes y pensamos de forma diferente, pero pensando en Oviedo. Son unos buenos presupuestos y yo les animo a que den ese paso y voten positivamente el presupuesto.

–Plantean 13 millones de incremento de recaudación en impuestos directos y tasas para 2025. Eso sale a unos 190 euros por familia. Parece mucho.

–No podemos mezclar en ningún caso la subida del IBI con las tasas. Durante la pandemia, con el objeto de beneficiar a los ovetenses, fuimos bajando el IBI en la medida necesaria. Y en esos tres años bajamos creo que un 0,01% un año, un 0,02 otro año y otro 0,01 otro año. ¿Para qué? Para que las familias que estaban pasándolo mal en ese momento no les repercutiera la subida del valor catastral de cada inmueble. Y en ese momento comentamos que lo más posible es que tuviéramos que recuperarlo más adelante. Y es lo que hacemos ahora, recuperar el tipo que teníamos en Oviedo.

–¿A quién va a repercutir más la subida?

–Los que tienen unos valores catastrales altos. Pero va a haber gente que si no se lo dicen, no se entera porque serán cinco, seis, diez euros como mucho, que creo que es la media que sale entre todos los inmuebles de Oviedo. En cuanto a las tasas, hay un decreto de la Unión Europea que nos obliga a repercutir a los ciudadanos esos gastos. Una ley que emana de la UE, pero que el Gobierno central lo recalca con un decreto donde dice que hay que aplicar la subida a todos los consumidores. El Partido Socialista quiere confundir a los votantes, porque la subida de tasas nos la imponen, y con el IBI nos recuperamos de la situación anterior y con una incidencia mínima. Porque el que tenga un IBI por encima de los mil euros, no llega a los cien euros al año.

–¿Cómo se va a dar contenido a la galería comercial del Palacio de Congresos de Calatrava?

–Lo primero es hablar de lo positivo de la operación. ¿Íbamos a dejarlo pudrirse o resolvíamos el problema? Son 45.000 metros útiles de una construcción magnífica que no está en ruinas ni mucho menos, como dice el Partido Socialista. Vamos a limpiarlo, vamos a actualizar todos los servicios que hay. Es una gran oportunidad para Oviedo, para empresas que ya se están moviendo, que ya están preguntando por el Calatrava y ya está preguntando por el parking, porque al entrar el Ayuntamiento ahí el parking ya vale más. Si no está vendido, es de milagro, pero hay compradores, que es lo importante.

–¿Ya hay compradores para el parking del Calatrava?

–Sí, claro que los hay, y más de uno. Aquello tiene que ser un centro de empresas que genere empleo porque a mí me obsesiona el empleo. Si logramos que el empleo aumente en Oviedo, aumentará el consumo y necesitaremos más empleo. Están llegando empresas a Oviedo, no hace mucho la incubadora, y ese es el camino que tiene que seguir el Ayuntamiento; como con la ingeniería Galeo, que primero se instalará en el chalet de Radio Vetusta, que se estaba cayendo y lo hemos rehabilitado –y luego irá al Calatrava–. Son unos chavales jóvenes, con ganas de trabajar y con una proyección internacional tremenda. Fue una operación magnífica la del Calatrava, diga lo que diga la oposición. La tasación a la baja le daba un precio de 19 millones... Pagamos cuatro y pico y les retuvimos tres y pico de IBI, que era de muy dudoso cobro porque lo podríamos cobrar a 15 o 20 años. ¿Qué quedaría del Calatrava en ese tiempo? Prácticamente nada.

–Cuando se construyó, se decía que se necesitaba medio millón al año para su mantenimiento.

–Posiblemente no estemos haciendo todo el mantenimiento que hay que hacer porque no es fácil, pero ahora se están limpiando todas las costillas y está quedando muy bien, pero habrá que forzar, ahora más que nunca, el mantenimiento del palacio en lo que es la cúpula y la zona superior porque lo que es el centro comercial está sucio, pero impecable para su uso.

–¿Y la puesta en marcha de La Vega?

–Lo de La Vega es un poco más lento, hay que hacer un plan especial. Tenemos ese hub de defensa, que yo espero que sea uno de los grandes pulmones de La Vega. Son empresas que necesitan crecer y dónde mejor que en esa zona. Viene gente ya de afuera a verla.

–¿Cuándo se verá algo más que palabras y convenios?

–Yo pongo año y medio, aunque podemos adelantarlo y sin retrasos.

–¿En 2026?

–Sí, en 2026 tiene que tener algo de vida aquello ya.

–Zona de Bajas Emisiones. ¿Sigue en pie la ampliación del parking de La Escandalera?

–Siempre he dicho que la caja del aparcamiento tiene que ser la misma. Es más, las paredes laterales del aparcamiento tienen que crecer hacia abajo para no dañar al Campo San Francisco y tiene que crecer posiblemente hasta cuatro plantas para pasar de 400 a 700 plazas de aparcamiento en el centro. Tenemos que rematar la gran plaza que surge ahí porque tenemos contradicciones con los arquitectos y hay que ajustarse, aunque yo espero que se solucione todo y el proyecto esté preparado la semana que viene.

–¿Se peatonalizará toda esa zona?

–No. Habrá una Zona de Bajas Emisiones con entradas al aparcamiento desde la calle Santa Cruz y Argüelles, pero quedarán dos carriles para los coches que tengan permiso para circular y para autobuses, y en Santa Cruz quedará un carril.

–¿Menos o más coches en la ciudad?

–Los coches tienen que llegar a la ciudad y hay que respetar la Zona de Bajas Emisiones, y es perfectamente compatible porque tenemos ya numerosos aparcamientos disuasorios. Tienes que permitir que la gente se acerque a Oviedo, no los puedes dejar a diez kilómetros, tienes que permitirles llegar a la ciudad.

–El paseo de Los Álamos está cada vez más abandonado.

–Lo entiendo perfectamente, pero no lo hemos dejado nosotros así. Fue un maltrato continuado durante años y años.

–Pero lleva cinco años de alcalde...

–Un tercio del paseo está afectado por la obra del parking. Hay un compromiso de recuperar el paseo cuando se haga la tapa del parking.

–La reforma de la avenida de Galicia. Se han dicho muchas cosas de la obra...

–Será una isleta central con farolas y árboles, dos carriles de subida y dos de bajada; el resto, ampliación de aceras porque no habrá plazas de aparcamiento. Creo que va a ser la gran avenida de Oviedo.

–¿Para cuando la reforma de la plaza de toros? Parece que no llega nunca.

–Hay una aprobación inicial de Patrimonio y espero que podamos adjudicar la obra este mismo año. Tenemos un anteproyecto negociado ya y espero que las obras comiencen en 2025. Un gran pabellón cubierto con 5.000 asientos más lo que es el coso. No para toros y sí para actividades culturales.

–¿No apuesta por los toros?

–No soy antitaurino, pero lo que está claro es que los toros en Oviedo fracasan. Los toros en Gijón y la ópera en Oviedo.

–¿Qué pasa con las escaleras del Tartiere?

–Es una inversión muy importante de dos millones de euros. Es un compromiso, pero lo haremos más adelante.

–El Palacio de los Deportes se retrasa... ¿Para cuándo?

–Yo espero que para marzo o abril podamos acabar.

–¿Le gusta la 'faba'?

–No existe eso en Oviedo. Para mí existe la plaza de la Cruz Roja. Me gusta, quedó muy bonita.

–¿Le hacen mella las críticas a su gestión?

–Sí, sobre todo cuando son mentiras. La oposición está para criticar la labor del gobierno, pero cuando la crítica se basa en la mentira permanente y en la ofensa permanente, me hace daño. Yo siempre respeto eso con la gente y ellos no. Yo creo que mienten exclusivamente buscando confundir a la gente. Creo que el Partido Socialista está en esa reiteración de mentir, mentir y mentir, para ver si logra que cale en los ovetenses, pero los ovetenses me conocen y saben que todo son mentiras. Saben quién soy.

–El Cristo mete miedo.

–Totalmente de acuerdo. Es un abandono histórico por parte de la Administración regional. Creo que se demoró en exceso el meterle mano y ahora hay una comisión que fue promovida por el Ayuntamiento para dar soluciones. Va a ser una realidad el derribo de edificios en el inicio del año 2025.

–Todo el mundo anda a vueltas con su sucesión, aunque ya ha dicho que si sigue con buena salud se presentará en 2027. De todas formas, en los mentideros políticos se dice que ese sucesor será su hijo...

–Mi hijo está mucho más preparado que yo. Es un personaje muy importante a nivel internacional. Lo que tiene que hacer ahora es trabajar. El otro, lo mismo, son dos triunfadores. No los vemos retornando. Pero, además, la sucesión se la gana cada uno. La sucesión es sólo del chalé en que vivo. El día que yo me muera les quedará el chalé si no lo gasto yo primero.

–Le ha dicho a Álvaro Queipo que debe tomar medidas dentro del partido.

–Mi apoyo a Queipo es total. Es un chaval que está muy preparado, con dos carreras y que trabajó para la empresa privada. Ese es el perfil que necesita un candidato del PP. A partir de ahí no puedo decir más que lo que ya dije: Hay que tomar decisiones y las va a tomar.

–¿Qué ve en la televisión?

–Mucho programa de preguntas, los concursos... 'La Ruleta de la Suerte' es un ejemplo o 'Saber y Ganar', después de comer. Como vea un programa de preguntas, me quedo y me gusta responder. También el deporte, el fútbol.

–¿Cocina?

–Me gusta, aunque no lo hago mucho. Además, tengo a una mujer que cocina muy bien. Eso sí, soy un fenómeno haciendo tortillas. Setas a la crema, cebollas rellenas...

–¿Hace la compra?

–Nunca. A veces bajo a comprar el pan.

–¿Cuántos trajes tiene?

–Muchos. Mejor dicho, los necesarios. Suelen ser lisos. No nos sobra nada, pero no nos falta nada, gracias a Dios.

–¿Vino o cerveza?

–Más vino que cerveza.

–¿Hace ejercicio?

–No, aunque tengo una bicicleta estática. Lo que sí tengo es la parcela planchada. Como tenga un rato libre, ahí estoy dándole.

–¿Cuánto duerme al día?

–No mucho. Me voy a la cama a las doce y a las cinco y media o las seis ya estoy despierto.

–¿Duerme con pijama?

–A medias.

–¿Qué es lo que más le molesta?

–La mentira.

–¿Es un alcalde enamorado?

–Enamorado de mi trabajo y de mi mujer, Marta. Me casé enamorado y aquí sigo. Yo me entrego en todo lo que hago, ya sea en el banco o en el Ayuntamiento.

–¿Qué piensa cuando le llaman «viejo o casposo»?

–Me molesta que lo digan porque soy menos anticuado que otros más jóvenes.