Adiós a José Luis Galán, un referente del Camino de Santiago

Sus apariciones públicas se habían reducido en los últimos años debido a los problemas de salud que presentaba, que le obligaron hace un año a dejar de presidir la asociación. Un cargo en el que le reemplazó Lourdes Campillo, quien ayer lo definió como una «persona excelente y un referente impagable para la asociación».

Galán deja viuda a Dolores Álvarez Noval con quien tuvo tres hijos: Francisco Javier, María y José Luis Galán Álvarez. Todos ellos recibieron ayer el pésame. «Fue un hombre con mucho don de gentes que disfrutó de todo aquello que hizo». «La ruta jacobea era su vida y su vocación», afirmó su hija, María, desde la sala número siete del tanatorio El Salvador, donde quedó instalada la capilla ardiente hasta que hoy, a la una de la tarde, se celebre la misa funeral en la basílica de San Juan El Real que será presidida por Javier Suárez.

Ambos mantenían una estrecha amistad desde hace «cincuenta años; Galán era un hombre que siempre estaba dispuesto a lo que fuera necesario». «Era entrañable y plenamente dedicado a la misión que tenía», agregó el rector de la basílica. Unas labores que compatibilizó con el cuidado de su familia, su trabajo en la Cristalería Garvés de la calle Rosal y el Centro Asturiano, donde fue directivo bajo el mandato de Pedro Pascal y fundó el grupo de Andarines con «el que recorrieron Oviedo». «Tenía mucha relación con él porque cuando fuimos a Santiago de Compostela nos preparó toda la documentación y credenciales y reunía todas las cualidades que tiene una buena persona», añadió el presidente del club del Naranco, José Manuel Granda.

También resaltó ayer su labor el concejal de Turismo, Alfredo García Quintana, quien lo recordó como «una persona comprometida con la defensa del Camino de Santiago y la proyección de la ciudad de Oviedo».

También estuvo volcado con la Sociedad Protectora de la Balesquida, que lo nombró socio de honor el año pasado siendo este su último acto público. «Era un 'balesquido' de pro y siempre nos dio consejos e ideas para llevar a cabo; era un socio al que teníamos especial cariño», según su presidente, José Antonio Alonso. Por su parte, el máximo responsable de la presidente de la Fundación Amigos de la Ópera, Juan Carlos Rodríguez-Ovejero, definió a Galán como un «hombre extraordinario».