La adicción al juego es «muy similar» a la de las drogas convencionales

Y es que son estas últimas las que han entrado con más fuerza en todo el panorama nacional. No obstante, y según las declaraciones de la directora del Área de Prevención de la Fundación Cespa-Proyecto Hombre y responsable del Plan Municipal sobre Drogas del Ayuntamiento, Aránzazu Fernández, los datos de estas, donde se incluye la ludopatía a edades tempranas, «no son muy extensos» en cuanto a series temporales. Ahora bien, sí hay una aproximación de cuáles serían las prevalencias de los adictos al juego. «Estamos hablando de unas prevalencias muy lejanas a las prevalencias por consumo de alcohol, por ejemplo», destacó.

Sin embargo, la evidencia científica afirma que el mecanismo de funcionamiento de la adicción al juego es «muy similar», a nivel cerebral, al mecanismo de adicción a otro tipo de sustancias o drogas. Por eso, los tratamientos comparten pautas en técnicas de intervención. Hay componentes diferenciales y componentes comunes, y si bien «también existen componentes específicos que deben incorporar los tratamientos para la ludopatía por el juego patológico, eso no significa que sean más complejos», apuntó Fernández.

A inaugurar las concurridas jornadas, repletas de estudiantes y asistentes de pasadas ediciones, asistieron, entre otros, el jefe de servicio de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Jesús Morán; el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño; y el alcalde, Alfredo Canteli. Este último señaló que en la ciudad de Oviedo la «problemática» de las casas de apuestas, «aún no ha llegado», pero avanzó que «se tomarán medidas» al respecto. «Es un problema muy grave y está desarmando a muchas familias, pero aquí parece que no ha trascendido todavía», aseguró. De este modo, el regidor aprovechó para llamar a «la juventud» a «estudiar, hacer deporte y prepararse para un futuro mejor».

En ese sentido, pero al respecto de las adicciones con sustancia, la directora del área de prevención de la Fundación CESPA-Proyecto Hombre, también declaró que la edad de inicio en el consumo de alcohol y tabaco, las «drogas legales», se sitúa en los 14 años, mientras que en el caso de sustancias ilegales como el cannabis, se eleva a los 15 o 16 años.