«Abarca muy bien todo el núcleo del barrio»

Esta calle que une la de La Argañosa con Lola Mateos, atravesando la comercial Valentín Masip, fue abierta en 1960 y recibió su nombre en sesión municipal el 14 de noviembre de 1963, en homenaje a monseñor Eugenio Pacelli, elegido Papa en 1939: Pío XII.

Se trata de una calle semipeatonal, muy amplia, luminosa y abierta. Además, cuenta con bastante tránsito, lo que la hace una buena elección para los comercios, aunque según afirman, «antes había muchísimos mas».

Siete años lleva en Pío XII Arniella y Caldueño estilistas. «Nos enamoramos al pasar de este local, lo vimos y nos resultó muy fácil instalarnos aquí», explica Lorena Arniella. «Nos gustó esta calle, es muy luminosa, muy abierta y hay mucho comercio», señala al recordar que está muy cerca de Valentín Masip o La Argañosa y, por lo tanto, tiene mucho tránsito de gente. «Nosotras estamos muy contentas».

Se trata de una calle semipeatonal, porque sí pueden entrar coches. «Eso es una ventaja, pero también es malo porque siempre tenemos delante camiones o furgonetas». Aun así tiene claro que recomendaría la calle a nivel comercial «porque yo creo que se vende más que en puro centro donde la gente va más de paseo, creo que los barrios mueven más gente», afirma.

Frente a la peluquería se encuentra el estudio de danza Andrea Lebeña, que lleva en funcionamiento más de doce años. «Elegí esta calle porque es el barrio donde vivo y me parecía una buena zona para arrancar esta actividad», apunta la propia Lebeña.

Considera que es una calle que ofrece diferentes servicios y que no está mal a nivel comercial. «No es céntrica, pero es muy transitada y coges una zona que abarca muy bien todo el núcleo del barrio», opina. Lebeña desea que «proliferen más negocios de diferentes tipos en esta zona, porque es lo que da riqueza al barrio, movimiento, visibilidad y vida», reflexiona, algo que considera muy necesario «en una época en la que se están cerrando muchos comercios no sólo aquí, sino a nivel general en la ciudad».

Karda Modas es uno de los negocios más longevos de la calle, lleva abierto desde 1985. «Mi madre tenía un negocio en Mieres y quería poner un negocio en Oviedo, le gustó este barrio y esta esquina», explica Rosana de Campo Seco. En estos casi cuarenta años «hemos visto morir un poco al barrio», lamenta, «antes había muchísimo comercio, estaba el centro de salud y era una calle con mucho tránsito».

Desde su punto de vista no es una calle comercial, «cada vez tiene menos y está todo más cerrado», pero agradece contar con una clientela «buena y muy fiel, que lleva comprando aquí toda la vida, las conozco de siempre, tengo una clientela excepcional» destaca. Sin embargo, lo tiene claro, a nivel comercial «sólo recomendaría Valentin Masip».

Haciendo esquina con La Argañosa se encuentra la carnicería frutería de Samira Benioual, que llegó a esta calle hace un año por casualidad. «Me hablaron bien del local y lo cogí porque es una zona que tiene muchos extranjeros y es una carnicería musulmana», explica.

Por el momento, está muy contenta «porque es una zona de mucho tránsito», algo que le viene muy bien para darse a conocer. «Tengo una carne muy buena y cuando la gente la prueba vuelve y se acaban haciendo cliente», comenta. El único inconveniente que le ve a Pío XII es el aparcamiento. «Es complicado venir en coche, pero sí la recomendaría a nivel comercial», concluye.

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