San Julián de los Prados, sin discusión

«¿Pero San Julián de los Prados no es el nombre que se le da a la zona desde siempre?». Lucía Alonso, estudiante de diseño gráfico, formula la pregunta que refleja el sentir de los ovetenses que ayer valoraron para EL COMERCIO la denominación elegida por otros ovetenses para designar el bulevar que se construirá en la entrada norte de la ciudad. O, más exacto, el bulevar que el equipo de gobierno tiene intención de construir con el fin de atenuar el impacto que la 'Y' genera en su entrada a la ciudad. «El nombre elegido apela a cómo se llama tradicionalmente a esa parte de Oviedo. Sin duda, me gusta más que lo de Princesa de Asturias, que no es de aquí», añade la joven. La opción, sin embargo, de llamar Premios Princesa de Asturias a la nueva calle obtuvo 2.431 puntos en el proceso de votación para bautizar al bulevar. Resultó ser la segunda alternativa, pero fueron menos de la mitad de los apoyos que concitó la denominación San Julián de Los Prados. «No me gusta nada Princesa de Asturias, está de más», coincide en señalar otra estudiante, Marián Ruiz, a quien no le hubiera disgustado que se hubiese votado mayoritariamente por un nombre más identitario. Carbayones quedó en tercer lugar en la consulta del Ayuntamiento.

La preferencia por San Julián no es cosa de edades. Antonio Fernández, jubilado, cree que este es el nombre «más acertado». Es mucho mejor que el nombre Princesa o Príncipe. Las denominaciones de lugares son, en general, más adecuadas que las de personas. Por ejemplo, tampoco me gustaba que cuando el PSOE presidía el Gobierno central se barajase para el apeadero de Llamaquique el nombre de Clara Campoamor». El matrimonio formado por María Sol Fanego y Ángel García asiente al preguntar por la idoneidad de la denominación escogida para el bulevar. «Es una referencia a la estupenda obra de arte que supone la iglesia», indican. Para María Oliva Pérez tampoco hay duda: «Si aquello se llama popularmente así, es lógico que se consolide el nombre». En opinión de la empresaria Ana Fonvella, lo relacionado con la cosa pública ha de tener un sentido más práctico: «Yo no le doy tanta importancia a los nombres de las calles. Todas son conocidas de una manera y así las seguiremos llamando, independientemente del nombre oficial. Hay otros problemas en la ciudad más importantes que resolver», zanja.

El representante de la Federación General de Asociaciones de Asturias, Javier Fernández, entiende que lo más importante en relación al bulevar no es precisamente el nombre: «Estamos de acuerdo con San Julián de Los Prados porque es la denominación más votada en un proceso de elección que, por cierto, no invitaron a nuestro colectivo. Pero el primer cometido del Ayuntamiento es buscar la financiación necesaria para que el bulevar se construya. Lo que no pueden hacer es construir la casa por el tejado», afirma el dirigente de la federación.

'Santuyano'

En el barrio, el nombre ilusiona. Al menos, en la Asociación de Vecinos Paulino Vicente Teatinos, cuyo presidente, Santiago Camporro, considera que «el bulevar no podía tener mejor denominación porque San Julián está anclado en la memoria de los ovetenses». Para el dirigente vecinal, la conveniencia de la elección está fuera de toda duda porque «evita otros nombres que podrían resultar conflictivos. Muchos de los vecinos del barrio participaron en el proceso de votación organizado por el Ayuntamiento y la gran mayoría eligió San Julián. Sabían que Santuyano estaba descartado, dado que ya existe una plaza que se llama así». Camporro se refiere a la reacción de Iniciativa pol Asturianu, que ha lamentado que el bulevar no se llame Santuyano, el nombre original de San Julián. Y es que, en el reglamento de la votación figuraba específicamente que el bulevar no podía repetir un nombre ya inscrito en el callejero ovetense. «No hay que escarbar para encontrar maldad en la denominación», coincide en indicar el portavoz de Ciudadanos, Luis Pacho, para quien el nombre es «plausible y lógico para el entorno».

Desde el PP, la concejala Covadonga Díaz indica que el proceso ha sido «un auténtico fracaso porque votaron 3.000 personas, algo que está lejos de la fiesta que ha definido a la tramitación la primera teniente de alcalde». En cuando a la elección del nombre, el PP lo ve «correcto y apropiado para el sitio». En representación del PSOE, Diego Valiño, se muestra satisfecho porque la elección es «fruto de una consulta popular». A Cristina Pontón, de IU, el nombre le parece «precioso» porque «refleja muy bien el espíritu de la zona».