Puerta a puerta hasta la victoria final

Una foto del precandidato Jorge García Monsalve de 'paquete' en un ciclomotor en una cuesta de Ciudad Naranco dejó esta semana reflejo en sus cuentas de apoyo en Facebook y Twitter, que para conseguir la firma de uno de cada cinco militantes de un partido que lleva 23 convocatorias electorales seguidas perdiendo en la ciudad, hay que moverse.

García Monsalve ha sido el más activo en las redes sociales. Donde ha colgado números de teléfonos móviles en busca de militantes despistados o faltos de tiempo para acudir en un auténtico horario de mañana y tarde a la Casa del Pueblo. El mismo estilo de campaña que ha intentado Guillermo Peláez, pero que, con mucho menos apoyo, no le ha permitido convertirse en un tercer aspirante a encabezar las listas del PSOE.

Hay diferencias. García Monsalve, empleado público y con hasta ahora poca presencia en la vida de la agrupación, debía darse a conocer. Wenceslao López fue el primer y jovencísimo candidato socialista a la Alcaldía en 1979 y concejal durante ese primer mandato. Nunca más tuvo un cargo político, pero fue secretario general de la AMSO y ha mantenido su participación en el debate político de la ciudad. Es mucho más conocido para los militantes, aunque casi un desconocido para los electores.

Los dos candidatos tienen perfiles opuestos. Monsalve es empleado público; López, ingeniero en IBM y profesor en la Universidad, pero ya jubilado. El segundo lleva 40 años en el PSOE de Oviedo, Monsalve dio el paso animado por el movimiento vecinal de su barrio, Fozaneldi.