Secciones
Servicios
Destacamos
Soy curiosa, no lo puedo evitar, porque creo con firmeza en la segunda parte del refrán del gato. Esa que dice que 'la satisfacción lo trajo de vuelta'. Por eso, en estos días he revisado por el mundo virtual -cada vez más dado él a ... enredar ficción con realidad sin ningún tipo de sonrojo- el auge de cierta canción antigua que yo creía un fósil musical, sólo entonado por viejos nostálgicos henchidos de soberbia y escasa madurez política, que no terminan de entender que su tiempo ya pasó. Pues, bien, resulta que estaba por completo equivocada. La canción, me refiero al 'Cara al sol', no es ningún desterrado himno sólo cantado por anacrónicas glorias con vanidad belicosa, sino por jóvenes (muy jóvenes) que lo corean y bailan al ritmo de un grupo rock con nombre de antediluviana soberanía imperial que no voy a decir porque no quiero darles publicidad alguna.
Sé que esto no es nuevo. Cada cierto tiempo ocurre e incluso se hacen montajes para que parezca que cantantes y políticos de moda entonan la canción con alegría, inventando sin rubor -desde los sectores totalitarios, antidemocráticos y ultranacionalistas de extrema derecha- una realidad que no es. Un peligroso camino para los jóvenes que se lo creen e imitan.
Pero no sólo del 'Cara al sol' vive este preocupante fenómeno. La vieja canción 'Primavera', de la División azul, se ha vuelto en estos días un 'hit' en redes como TikTok, donde párvulas jovencitas poseídas por un desenfrenado espíritu patrio tararean «Cara al Sol canción antigua y nueva/ Cara al Sol es el himno mejor/ Cara al Sol y morir peleando/ Que mi patria así me lo pidió», al aplauso de cientos de comentarios sobre nuevos alzamientos, mujeres de su casa, buenos y malos españoles, etc.
Y que conste que no me parece mal que nuestros jóvenes conozcan estos cánticos y sean duchos en cómo y por qué se crearon; cómo han sido utilizados tanto en su nacimiento como con posterioridad. Quién los mandaba cantar. Me parece algo incluso necesario, pero, almas mías, de ahí a ponerse a canturrear y bailar esto como si fuera el último éxito de, no sé, elijan cantante favorito... Y esto se debe a que hemos dejado que en la era de la información en realidad gobierne la desinformación. La posverdad. La mentira. Lo que provoca un peligroso desconocimiento de la historia de nuestro país (toda su historia, lo que incluye sus canciones, sus guerras y sus muertes) y un progresivo acercamiento de los jóvenes, que se sienten marginados o insatisfechos con el status quo político, a la extrema derecha a través de estas plataformas, lo que lleva a la radicalización, la polarización política y la propagación continua de todo tipo de bulos y falsedades.
En las redes sociales uno puede ver y escuchar a incautas juventudes bailar y aplaudir «¡Por la fe y por la patria, las banderas en alto! ¡Viva Cristo Rey! ¡Arriba España!», y después ponerse a bailar una canción titulada 'Revolución' (del grupo antes citado), donde se habla de raza, legado, raíces, hacer la revolución, agitar banderas y caminar juntos hacia un nuevo amanecer. Saben lo que dice el 'Cara al sol', ¿verdad?: «Volverán banderas victoriosas/ al paso alegre de la paz (...)/ Arriba escuadras a vencer/ que en España empieza a amanecer». El discurso, por cierto, con el que empieza esta canción es de Blas Piñar.
Viven algunos de nuestros jóvenes, me temo, en una sombra de recreación histórica que falsea la realidad; que vende lo que no fue y oculta lo que sí ocurrió. Se les habla de triunfo, paz y gloria, pero no de muertos, crueldad y guerra; se les exhorta sobre tradición, victoria y honor, pero no de las malas herencias, el absolutismo y la oscuridad de uno de los periodos más terribles de nuestra historia reciente. Reciente porque todavía hay personas vivas de aquel tiempo. Porque todavía hay personas muertas que no reposan como deben; porque todavía, hoy, hay quienes venden amor a la muerte en lugar de a la inteligencia y han encontrado en estos jóvenes indoctos y cansados de una clase política que no les escucha, el campo perfecto en el que sembrar su mensaje de odio.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Nuestra selección
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.