Con dos retoques lógicos, Gallego le dio al Sporting un aire ambicioso, con mentalidad atacante en busca de una victoria que debió ser mucho más contundente. Los apuros finales no se merecieron, aunque hayan sido por la estrechez del marcador, no por los amagos del ... Mirandés, bien controlados por los rojiblancos.

Publicidad

Esta vez el Sporting dio una satisfacción plena. Por el triunfo y también por el fútbol desarrollado. La presencia de Pedro fue clave para mover al equipo y 'Puma' Rodríguez proporcionó rapidez y alegría en su banda. Esta vez se sacrificó la monótona posesión habitual para brillar en el juego directo, con codicia para tirar a portería. Ayer, los rojiblancos tiraron entre los tres palos más del doble de veces que en los dos partidos anteriores.

La diferencia mínima del descanso no respondió a fútbol mostrado por uno y otro equipo. El Sporting fue muy superior al Mirandés, con juego vertical, pases entre líneas, llegadas y disparos. Por fin un gol de estrategia. El segundo, que daba tranquilidad, fue un zarpazo espectacular de Pedro, aunque se complicaron las cosas con una estrategia mal defendida. En cualquier caso, El triunfo fue merecidísimo. Se vio el partido con mejor fútbol de la etapa de Gallego.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad