El otro día me preguntaban en una reunión (con micrófono, pero sin grabación alguna) si a Sánchez le quedaba poco. Si Koldo, Globalia, catalanas y otras cosas de meter estaban acelerando su fin al frente del Gobierno. Y yo qué sé. Hay que tirar de ... la palabra que tanto se ha usado en estos tiempos: aritmética. Mientras le voten en el Parlamento los que lo han hecho hasta ahora (ya tenga con ellos acuerdos de investidura o de legislatura) ahí seguirá.

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Y si hubiera elecciones generales, pues también se vería. Porque la amnistía y bla, bla, bla, pero la retórica de los partidos de izquierdas sobre la amenaza de que gobierne la derecha es en muchos votantes (a veces críticos con el PSOE) un miedo atávico a que vengan unos señores de otros tiempos a quitar derechos y libertades. Así que la respuesta es que ya veremos. Y claro que la gente en esa reunión de gente principal lo que de verdad quería saber es qué demonios le pasa a Kate Middleton.

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