Toca sufrir
Rogelio García
Martes, 1 de abril 2025, 02:00
Secciones
Servicios
Destacamos
Rogelio García
Martes, 1 de abril 2025, 02:00
Decía el sabio don Luis Aragonés que lo más importante en fútbol sucedía en las diez ultimas jornadas. Llegado ese momento, la situación de nuestro ... Sporting es muy preocupante, con la amenaza del descenso cada vez más cercana.
Tiempo habrá para exigir responsabilidades sobre la planificación de la plantilla del primer equipo y también la del Sporting Atlético, con Zulaika como primer damnificado, pagando culpas propias y ajenas. Aquellos barros del verano traen estos lodos de invierno. El Sporting en riesgo de descenso y el filial a19 puntos del líder, el Oviedo Vetusta. Esa es la triste realidad.
Rubén Albés apostó por un 1-4-3-3 ante el Huesca. La posición adelantada de Dotor modificaba por momentos el sistema al 1-4-2-3-1. Dubasin tapaba la banda derecha en defensa, colocándose como segundo punta en ataque, propiciando los desdoblamientos de Guille Rosas. En la banda contraria, Gelabert creaba huecos para las escasas subidas de Diego Sánchez.
Sorprenden últimamente las alineaciones del Sporting. El domingo extrañó ver a Olaetxea como defensa. Maras y Diego ya formaron con éxito la pareja de centrales varias veces. Era la apuesta generalizada, máxime con Pablo y Cote en el banquillo. Que Gelabert rinde menos por fuera que por dentro es evidente en un jugador de sus condiciones. También parecía lógico ver en banda a Dubasin con la ausencia de Nico Serrano, pero el míster no lo decidió así.
El plan de partido de Rubén Albés aparentaba estar más dirigido a neutralizar las virtudes rivales que a potenciar las propias. Lejos queda la identidad y el estilo particular del Sporting del inicio de la Liga. La primera parte tuvo poco fútbol. El cuadro gijonés, pese al excelente tanto de Nacho Méndez, no se encontraba a gusto en el campo. El Huesca esperaba su momento para sacar rédito a una de sus mayores virtudes, el balón parado.
El 2-1 al descanso era excesivo castigo para el conjunto rojiblanco. El VAR tomó de nuevo protagonismo al no advertir lo que pareció un claro empujón a Christian Joel en el segundo tanto local y en una posible segunda tarjeta en el penalti a Dubasin. Dado lo variable de sus criterios en jugadas parecidas, solo cabe esperar que salga cara en sus cambiantes decisiones.
En el segundo tiempo el Sporting pasó a defender en bloque bajo, donde más sufre. Los problemas en cada córner defensivo eran enormes. Colocar algún jugador al rechace para segunda jugada o incluso mantener algún punta ayudaría a reducir tanta aglomeración en el área.
El 1-4-4-2 con el que el Sporting acabó el partido con el fútbol directo que el Huesca practicaba entonces dejaba descolgados a Campuzano y Caicedo en búsqueda de contraataques casi inexistentes. Agotar los cambios o modificar el sistema a defensa de cinco quizás hubiera sido más práctico, admitiendo lo fácil que es criticar hechos consumados.
Hay que reaccionar. Y ya, antes de que el sufrimiento se convierta en tragedia deportiva.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.