Secciones
Servicios
Destacamos
Sagrada magia de la palabra falseada por la conmutatividad que niega lo nombrado. La magia degenera en palabrería que permite todo, incluso negarse; la palabra suena a uno, pero contiene otro. Los brujos exprimen su sonoridad para colar una nueva semántica, llevarnos a su mundo ... y apropiarse del nuestro. La empatía en su boca significa egolatría, la solidaridad es un slogan, tras adueñarse de la palabra y travestir su poética magia en truco barato. Duele ver palabras plenas de sentido ético vaciadas, vacías, al servicio de la ruindad.
El talento pasa a ser recurso privado; la sociedad, una suma de egoístas individualidades; el mérito, exclusivo fruto personal; la competencia virtuosa del competente, lucha sin cuartel entre competidores; el progreso, una carrera loca; la calidad y nivel de vida, consumo desbocado, hasta hacer de las palabras que iluminaban la crítica una tapadera de las miserias; la magia verbal es anulada por palabras falseadas que blanquean cuentas ocultas, lavan sucias manos, elevan al villano y hacen operaciones de cirugía estética-ética al miserable.
La empatía, con los colegas, con el resto es optativa; el amor, como la solidaridad, empieza por uno mismo (generalmente, donde acaba); los seres humanos son iguales, algunos mucho más; todos tienen derechos, los míos, además, Derecho. La justicia es universal, pero su aplicación empieza por algún sitio, habitualmente cercano; la seguridad, saludable y sana -Ayuso sabe de epidemias y campañas preventivas-, exige sospechar del extranjero; la libertad es un valor sagrado del mercado extraño para quien se queda a la puerta, y la sensibilidad, otro valor que elimina fronteras entre especies, compatible con blindarlas al semejante. El lenguaje no es neutral, toma partido, ahora confirma que la evolución exige adaptación para mutar... sin inmutarse.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.