![Necesaria memoria](https://s1.ppllstatics.com/elcomercio/www/multimedia/202110/10/media/marc.jpg)
![Necesaria memoria](https://s1.ppllstatics.com/elcomercio/www/multimedia/202110/10/media/marc.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Asturias ha levantado las restricciones. Con la «pandemia arrinconada», en palabras de Adrián Barbón, y el anhelo de darse un respiro de la angustia, el presidente regional se ha decidido a levantar la barrera de limitaciones que aún atenazaba a la hostelería, los centros educativos ... y el sistema sanitario. Una vez más ha preferido ser cauteloso. Pese a superar un verano de masas con una cifra mínima de contagios, el presidente regional ha esperado a octubre para decretar el alivio. Ha querido estar seguro de la eficacia de la vacunación y tentarse la ropa tres veces antes de lanzar las campanas al vuelo y dejar la mascarilla en los espacios cerrados como la última amarra. En la mente de los responsables regionales bullían aún las cifras de muertos de hace un año, cuando el jefe del Ejecutivo compareció para advertir de que los asturianos se enfrentaban al periodo más duro desde la guerra civil y establecer unas medidas tan severas que pusieron a prueba el aguante de la sociedad y la capacidad del servicio de salud.
La región se mantuvo blindada en Semana Santa, cuando otras autonomías con índices de vacunación más bajos se atrevieron a levantar la mano para cerrarla luego con angustia. Incluso en verano, cuando el virus resultaba menos amenazante, los festejos fueron anulados y la hostelería se mantuvo con horarios y aforos limitados. Asturias prefirió correr con la vacuna. Nuestros sanitarios lograron inmunizar a la mayor parte de la población antes que en ninguna otra región española. La vacunación conjugada con la cautela parece haber dado sus frutos, aunque aún nos cueste creérnoslo. Pero llegar a este punto ha tenido un coste tan alto que obviarlo resultaría irresponsable.
En la que tal vez haya sido su comparecencia más deseada, Barbón anunció un homenaje anual a quienes han muerto durante la pandemia. Cada 11 de marzo, fecha en la que Asturias registró de forma oficial su primer fallecido por coronavirus, Avelino Uña. Necesitamos la memoria. No para anclarnos al dolor. Ni solo por el necesario recuerdo de las víctimas y el sacrificio de tantos, que hacen justo cualquier tributo. También porque de ella nace lo que aprendemos. Que en este caso debería ser mucho cuando aún nos falta tanto por saber.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La víctima del crimen de Viana recibió una veintena de puñaladas
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Nuestra selección
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.