A nadie se le escapa que las personas mayores estamos inmersas en una brecha digital que está provocando nuestra exclusión en casi todas las gestiones que diariamente estamos obligados a hacer telemáticamente. Este serio problema no solo está en las relaciones con las entidades bancarias ... y en muchos otros sectores de la economía española, sino que principalmente está en la propia Administración pública

Publicidad

Cuando estas personas mayores, como ejemplo, queremos presentar desde casa nuestra declaración de la renta, sacar un billete en la Renfe, dar un parte de seguro, dar la lectura del contador a la empresa distribuidora de gas, solicitar una cita previa con un departamento de la Administración autonómica o del Ayuntamiento, nos encontramos con un entramado de burocracia digital, que materialmente nos obliga a hablar con máquinas, en vez de con personas.

Nosotros, los mayores, no estamos en contra de la digitalización y del progreso que generan las nuevas tecnologías. Lo que queremos es que se nos ayude, que se nos dé la formación necesaria para conseguir una adecuada alfabetización digital, y que se establezcan soluciones para reducir esa brecha.

Los problemas de la banca están ahí y ya son archiconocidos. Parece que, en breve, van a empezar a aplicarse las necesarias medidas. En esta misma línea, las empresas privadas parece que también son de las que más pasos están dando. Pero ese no es el único problema. Si vemos lo que ocurre en la Administración pública, que es la que debería de haber hecho un mayor esfuerzo para relacionarse con las personas mayores, nos daremos cuenta de que no han hecho prácticamente nada y, por ello, la digitalización está generando muchos problemas a las personas mayores que necesitamos relacionarnos telemáticamente con la Administración.

Publicidad

Yo, personalmente, me considero una persona mayor, pero muy avanzada tecnológicamente y, aun así, como cualquier otro ciudadano mas joven, tengo continuados problemas para moverme dentro de las sedes electrónicas de la Administración. Unas veces porque mi navegador es aceptado en unos portales, por ejemplo, de Tráfico, pero no en la Seguridad social. Otras veces porque cuando accedo con mi certificado digital, que me ha extendido la FNMT, el sistema se cuelga y entonces lo que tengo que hacer es instalar el lector del DNI electrónico para autenticar mi firma. Eso sí, antes tengo que acercarme a la Comisaría de Policía para cambiar mi clave de acceso, ya que cada dos años caduca.

Otras veces, tratando de ser mas ágil, tengo que solicitar una clave PIN temporal, por ejemplo, a la Agencia Tributaria y, qué casualidad, cuando voy a pedirla para que me la envíen por correo electrónico el navegador se bloquea y te da un error. Entonces cambio de plan, voy al móvil donde tengo una App para obtener una clave PIN y ¡¡eureka!!, aquí si me dan la clave. Entonces, ¿por qué desde el PC no y desde la App sí?

Publicidad

Ante este panorama tan desolador para las personas mayores, en Secot, organización a la que pertenezco, nos hemos movido para arrimar el hombro y tratar de ayudar a reducir la brecha digital de las personas mayores. Nos hemos impuesto la misión de conseguir que Secot sea un referente para transmitir conocimiento y aumentar el número de personas que tengan un buen conocimiento de las TIC.

Para ello, hemos creado modelos de formación estándares en función de los grupos de edad y grupos sociales, al objeto de acercar a estas personas a las nuevas tecnologías. En todas nuestras delegaciones nos estamos acercando a personas mayores para tratar de hacerles familiares las nuevas tecnologías, para mejorar sus comunicaciones con el entorno familiar usando WhatsApp o Facebook, para que puedan controlar sus cuentas bancarias con el uso de las diversas aplicaciones, tanto del ordenador, de una tableta o de un teléfono móvil, o para manejar las Apps que interactúan, por ejemplo, con la Seguridad Social.

Publicidad

Aun así, somos conscientes de que todo lo que hagamos será poco, ya que nuestras capacidades son limitadas para llegar a todos los mayores que lo necesitan.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad