Una semana ilusionante

El buen ambiente se aprecia en las sesiones de la semana, incluido el acto de los coches, bajo la mano del sportinguismo de corazón de Alberto Porrúa. Es un valor que ahora no abunda. Hay mucho artificial.

El triunfo sobre los maños elevó la autoestima, que subió más cuando se vio la floja imagen del Eibar a orillas del Nora. El equipo armero que mañana recibirá al Sporting será diferente. Es uno de los que tiene más nombre por su reciente trayectoria de Primera y asiduo en los 'play offs', pero cada año rebaja su potencial.

Algo similar le ocurre al Sporting. En los métodos de Albés falta asegurar la finalización. Por ocasiones de gol pudo evitar la derrota ante el Levante y ganar al Eldense y al Tenerife. Menos afortunado en la creación estuvo en Almería y Santander. Las temporadas tienen muchos obstáculos. Los problemas ahora se aprecian más en la defensa por la abundancia de lesiones. El año pasado se dijo desde la 'planta noble' que las inversiones en Mareo iban a reducir el número de percances. Un anuncio irracional.

En cualquier caso, Albés tiene suficientes peones para el partido de Ipurúa. Las lesiones son gajes del oficio y las lamentaciones no valen. La realidad es que el Sporting tiene un equipo con detalles ilusionantes y capacidad para puntuar en Eibar. En Segunda hay demasiada igualdad.

En el filial, Albés tiene pocas garantías para emergencias. Es la consecuencia del método Garro con la cantera, cada vez más inexistente. El Sporting Atlético tiene lo justo para andar por Tercera. La prueba de fuego del domingo será en El Requexón. La media es de cuatro canteranos en el once de cada jornada. Casualmente, los traspasos importantes que solucionaron momentos económicos delicados a este Real Club fueron jugadores de la casa. Lo extraño es que el montaje permitido sea peor y más caro, mientras el club pierde más de cuatro millones por ejercicio. Explicárselo a los dirigentes de Orlegi es una pérdida de tiempo.

La decepción del femenino es palpable, salvo el inesperado triunfo copero en Oviedo. El resto lo suma por derrotas. La temporada se presenta preocupante, por el desinterés del jefe de la Academia. Cuando se vaya a ver si por lo menos queda el solar.

De todas formas, un buen resultado en Eibar oscurece el resto de deficiencias, sinsabores y contrariedades. Las alegrías del primer equipo pueden con todo.