A seguir haciendo la goma

En el caso del Sporting, las ilusiones se mantiene e incluso aumentan por los resultados de los rivales directos y por la imagen de mediocridad que enseñan. El Leganés, líder de la categoría, no dio tal sensación en su visita a Tenerife, ante un anfitrión que ya está sin aspiraciones.

En Elche, el Sporting causó una decepcionante imagen en el primer tiempo, atribuible a la mentalidad 'aMARrategui' de Ramírez, quien racionaliza las alineaciones con los marcadores en contra. El míster canario tiene la manía de no tener un sello de identidad propio, para cambiar cada semana según el rival al que se enfrente. Sacar seis defensas en Elche fue un disparate que pagó con la derrota, aunque la modificación del descanso mejoró la imagen, pero no el resultado final. El técnico canario tiene muchas obstinaciones con alineaciones, planteamientos y jugadores. Lo extraño es que nadie en su batallón de auxiliares le advierta de sus ligerezas futbolísticas. Si pasa, no hace caso.

Pese a todos los tropiezos, las seis jornadas que faltan son una eternidad en la que aún puede pasar de todo. De momento, el domingo viene el Villarreal B. No hay disculpa para no ganar, incluso con la lista de bajas. Sorprende que haya tantos lesionados después de haber nivelado El Molinón para evitar lesiones -¡vaya genialidad!- y aplicar un método especial para la prevención de problemas musculares, según se anunció desde la planta noble con una osadía insólita. La pasada semana, tres futbolistas que no jugaron en Elche se quejaron de dolencias en el sóleo. Quizás el preparador físico no usó los criterios impuestos desde las Ciencias Aplicadas al Deporte, con la que parece haberse inventado la medicina deportiva importada desde México. No estaría de más que los médicos y doctores americanos de Mareo se colegien en España, para que sus títulos puedan ser homologados aquí. No es dudar de sus conocimientos, pero las cosas es mejor hacerlas bien.

Ramírez tiene suficientes jugadores para hacer una alineación racional y un sistema de juego coherente. Es necesario ganar para seguir haciendo la goma y pensar que la lucha por el ascenso es posible, sin mirar atrás, ni recordar las decisiones inconsecuentes que impidieron estar ahora mejor situados.

El Sporting Atlético se despidió de las pocas aspiraciones de ascenso directo que tenía. La programación, de la que es responsable Óscar Garro, director de Mareo, culmina su gran fracaso de este curso, pendiente de suavizarlo en tres eliminatorias. Quizá el señor Irarragorri no se paró a echar cuentas de lo que le cuestan los incompetentes que planificaron una estructura con un rendimiento deportivo tan inútil. Con los resultados deportivos y económicos lo entenderá.