La resaca del triunfo en Burgos

En El Plantío se apreció que cuando Yáñez transmite seguridad el equipo actúa con más solidez. Y si el complemento es Dubasin, las opciones de éxito aumentan. Sin duda, el 'Pingüino' es la revelación de esta temporada. Sorprende que en el Oviedo no hayan sabido aprovecharlo. La confianza del entrenador es fundamental. Ahí están los resultados, trabajados cada jornada, con un equipo bien conjuntado por Albés, uno de los principales pilares de un Sporting que transmite más confianza que la que se apreciaba en agosto. El míster genera más garantías a la afición que los dirigentes.

El sábado viene el Granada sin sus cuatro internacionales. Regresan caras conocidas. Insua fue el mejor central del Sporting la pasada campaña. Se negoció tarde y a la baja porque se buscaban jugadores baratos. Se hizo el paripé para que se fuera. Mariño dejó huella en Gijón. Aquí ganó tres ediciones del Molinón de Plata, trofeo que lleva cuatro años en excedencia. El portero gallego se fue para que el club ahorrase un buen dinero.

Alfredo García Amado será el representante institucional del Granada. Gijonés y sportinguista, es una persona querida en la casa. Sabía incentivar al personal. En sus ascensos, con el aumento de ingresos, destinaba una pequeña prima para los empleados. Tenía a la gente contenta y bien dispuesta, con un trato paternalista. De aquella no había chamanes.

En cualquier caso, en cada momento sólo cuenta el último resultado. Al aficionado le interesan los marcadores y la clasificación. Es lo que más incentiva a los seguidores.

El Sporting Atlético ganó con autoridad al entusiasta Avilés Stadium, con un doblete de Amadou, que ya lleva tres goles en este curso, en diez partidos. Con casi 23 años, en Mareo le ven futuro. Albés, de momento, no. El filial no le ofrece garantías al entrenador del primer equipo, con una cantera que cada vez es menos cantera. Tampoco da para negocio. El patrón no debe estar contento con este plan.

Entre los fracasos de la jornada está el Sporting C, derrotado en Barcia y séptimo clasificado en Primera Asturfútbol, o sea, Regional Preferente, lejos del ascenso y sin jugadores para promocionar. Es un equipo que no tiene ningún sentido. El femenino recibió otra derrota con goleada. Es colista y el más goleado con un oscuro futuro tras el primer tercio liguero.

Son los resultados de las planificaciones de Óscar Garro, director de Mareo, y sus subalternos de confianza. Y ahí siguen.