El sábado no fue de Gloria, ni hubo Resurrección. El Sporting prolongó su particular Pasión con un equipo que despertó esperanzas en la primera parte, pero el agotamiento lo hundió en un segundo tiempo desconcertante.

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El Sporting y el Racing protagonizaron un partido con un ... excelente ambiente, con más sentido en el juego de los visitantes, pero más raza en los locales. Djuka aprovechó una cantada del portero racinguista para marcar. La ventaja ilusionó a la parroquia rojiblanca, que pudo aumentar en una ocasión de Djuka, como las que le ponían a Fernando VII.

En el segundo tiempo se decidió el partido. El Racing de José Alberto fue con decisión a por la victoria y el Sporting de Ramírez se desmoronó. El juego aéreo no fue el fuerte de los rojiblancos, que ftuvieron demasiadas imprecisiones en el centro del campo, lo que creó inseguridad. Además, en el plano físico el equipo es una ruina.

El gol de Gaspar no fue suficiente. El Sporting no supo aguantar el resultado. Los cambios llegaron a destiempo y no mejoraron. Todo lo contrario. La defensa se vio superada, con un centro del campo diluido. Así se perdió el partido. El final fue de desencanto, también por la lupa del VAR con la roja a Izquierdoz y la mano de Varane. Con papel de fumar.

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